Boaz Berman: “Como artistas, debemos hacer que el público se sienta más unido"

Han pasado ya 25 años desde que el bailarín israelí Boaz Berman fundase Mayumaná: un espectáculo de danza, percusión, ritmo y luces donde el sonido y las coreografías transmiten una gran energía al público. Este mes Mayumaná está de gira por Galicia con su electrizante espectáculo “Currents”, con su primera parada en Ourense el próximo 15 de septiembre. ¿Cómo conciben sus shows? Funciona de esta manera: presento una idea y un concepto y lo pongo en común con los otros artistas. Es entonces cuando elaboramos la idea y buscamos nuevos ángulos. Al trabajar con un grupo, les dirijo y les doy instrucciones para comenzar a poner la idea en práctica. A partir de ahí, le damos unas cuantas vueltas más hasta que, cuando siento que está listo, compongo la música y pasamos a una fase donde lo ponemos en práctica con una interpretación más libre, de manera que no siempre lleguemos a los mismos resultados. La verdad es que me gusta que el proceso creativo sea un trabajo colaborativo. ¿Cómo nace “Currents”? Es una obra que gira en torno a la energía. Para crear el espectáculo sacamos una única idea del ámbito de las corrientes eléctricas. Concretamente, en el conflicto histórico entre la corriente alterna de Nikola Tesla y la corriente continua de Thomas Alva Edison, la AC y la DC. Hoy en día la situación es diferente, no podemos usar solo una de estas corrientes: nuestro coche emplea una mientras que la instalación eléctrica de nuestra casa presenta la otra. Al final, todo coexiste en armonía, donde confluyen diferentes pueblos y puntos de vista. Y es una mejoría. Es semejante a cómo actúa nuestro elenco: bailarines y músicos procedentes de diferentes orígenes que conectan y crean armonías en el escenario. ¿Es mejor expresar estas ideas con lenguaje corporal? Es nuestra manera de hacer las cosas; no sabría decir si es mejor que otras. Para mí, después de muchos años de exploración, el cuerpo es uno de tantos elementos de las actuaciones. Lo que distingue a nuestros espectáculos de otros son las personas. Si, por ejemplo, vas a ver un musical, ves roles muy definidos: cantantes, bailarines y músicos. En el caso de Mayumaná, los miembros de nuestro reparto lo hacen todo, porque es un show muy físico. Mi filosofía consiste en visualizar la música. ¿Por qué convierten objetos comunes en instrumentos? Es una historia simple. Cuando era pequeño quería aprender a tocar la batería, pero mis padres no tenía dinero para pagarme unas clases. Decidí construir mi propia percusión con otros objetos que podía encontrar por casa. También, como practico deporte acuático, tocaba en el agua. Quizás Mayumaná haya sido la primera compañía en generar un buen sonido con agua. Otra razón importante es que de esta manera gastamos menos dinero en instrumentos. Además, queremos inspirar a otros para que creen música con lo que quieran. ¿Qué rol tiene la tecnología en “Currents”? En concreto, como trata el concepto de “energía”, no empleamos un escenario al uso, sino una gran pantalla que tiene la función de un actor que aporta un tipo de intensidad especial a todo el conjunto. ¿Les exige mucho cada actuación? Cuando preparamos un tour entrenamos todos los días durante tres meses y nos reunimos periódicamente. Durante la gira pasamos muchísimo tiempo viajando en los autocares; nada fácil. En cada uno de nuestros destinos tenemos que montar el escenario, ensayar y realizar las pruebas de sonido e iluminación. Aparte, también realizamos clases de movimiento y de vez en cuando reciben sesiones de fisioterapia. ¿Prepararon nuevos shows durante la pandemia? Durante el confinamiento más restrictivo no pudimos trabajar en absoluto porque no estaba permitido atravesar fronteras. Sin embargo, tuve mucho tiempo para pensar y hacer algunos vídeos divertidos. Cuando por fin pudimos hacer gira por España hace un año fue muy emocionante: al final del show el público, después de meses de inactividad, estaba tan conmovido que nos felicitó entre lágrimas. Ese es uno de nuestros propósitos: la alegría del arte y el arte de alegrar. ¿Cree que el mundo necesita más armonía? Por supuesto. Hoy en día las noticias diarias son deprimentes: el clima, los desastres naturales y la gente cada vez más violenta y menos paciente. Como artistas, nuestro deber es crear para que el público se sienta más unido en su disfrute.