Los alcaldes de Paderne y Taboadela advierten del interés empresarial
La falta de activación de la urbanización en el Val da Rabeda preocupa en Taboadela y Paderne de Allariz, donde han surgido reclamaciones para activar el suelo industrial de casi 2 millones de metros cuadrados propiedad de la Xunta y que permanece a la espera de poder ser utilizados. Esta misma semana, los socialistas de Taboadela pidieron en el pleno municipal la dinamización de esta zona para "poder ofertar solo industrial de grandes dimensións a precios competitivos a empresas que están optando por trasladarse ao norte de Portugal".
El portavoz socialista, Álvaro Vila, defendió esta moción, que finalmente no salió adelante por desavenencias en el articulado del gobierno popular, que cuenta con mayoría absoluta en la corporación municipal. El alcalde popular se mostró un firme defensor del proyecto de Val da Rabeda, presumiendo de que fue "o pai desta criatura". El regidor sostuvo que ha defendido en varias ocasiones ante la Xunta "a necesidade de por en marcha esta zona industrial".
Por su parte, los socialistas defendieron la "oportunidade de engancharnos" industrialmente con el aprovechamiento de los dos millones de metros cuadrados que la Xunta tiene entre Paderne y Taboadela. "Especialmente en Taboadela, que pola súa situación é un lugar idóneo para o seu desenvolvemento", añadió Vila.
En Paderne también defienden esta reivindicación. El alcalde popular, José Manuel Fernández, señala que "xa pedimos dúas ou tres veces a posta en marcha", subrayando que "xa recibimos o interese de catro iniciativas por facerse con algún destes terreos".
De hecho, según el regidor, hace ocho meses recibió la propuesta de un grupo de agricultores con la intención de poder usar alguna de las parcelas para poder sembrar cereal. Sin embargo, esto quedó parado ante el compromiso de la Xunta para estudiar la reactivación de dicho espacio con fines industriales. "De feito, situamos no PXOM de 2008 a zona industrial no Val da Rabeda, e o non estar urbanizado estanos lastrando á hora de poder ter empresas", señala Fernández.
Entre los problemas que cuentan en Paderne es que entre todo el suelo propiedad de la Xunta "hai algunha parcela privada polo medios", lo que supone un atranco importante a la hora de poder poner algo en marcha.
El Val da Rabeda es un proyecto que contó con 18 millones de euros de inversión y que se encuentra todavía paralizado a día de hoy. Los concellos que limitan con San Cibrao y Pereiro de Aguiar lo consideran hoy un "impulso" importante para su escaso tejido industrial.
