La crisis demográfica cabalga desbocada y las administraciones apuran recursos para tapar esas vías de agua. Los concellos, que son la administración más cercana al ciudadano, son también los que sufren en propia carne el envejecimiento de sus habitantes. Para colmo son los que menos recursos tienen para ayudar a las parejas que deciden tener hijos.
Un somero repaso por los municipios de la provincia sirve para dividirlos en dos apartados: los que se limitan a ser ventanilla para tramitar ayudas que establecen instituciones como la Diputacion o la Xunta y los que drenan su propio presupuesto arañando dinero para primar nacimientos.
Entre 300 y 1.000 euros es la cuantía media que otorgan los concellos, aunque la casuística varía, si bien entre las condiciones está en todos el nivel de ingresos o la exigencia de empadronarse en el municipio. En casos como O Bolo las ayudas son progresivas y pueden llegar hasta los 1.200 euros para el tercer hijo. Para el primero, la cifra se queda en 540.
¿Y sirven para algo estas ayudas? Es dificil discernir hasta qué punto empujan a la procreación. Avelino de Francisco, alcalde de Cortegada, echa cuentas y le sale que en los últimos cinco años hubo veinte nacimientos "e isto axuda ás familias". Cada hijo que nace en un municipio de la provincia es un consuelo porque los datos son demoledores. En el conjunto provincial cerca de un tercio de la población supera ya los 60 años, pero es que hay concellos donde la excepción es que haya niños.
Deriva imparable
Según cifras oficiales del Instituto Nacional de Estadística, en 1978 nacieron en Ourense 4.619 niños y en el pasado 2018 la cifra cayó hasta los 1.488. Es decir, el descenso ha sido del 67,7% en los últimos 40 años. Pero un análisis por comarcas revela hasta qué punto la dentellada demográfica ha sido lesiva durante el citado periodo. En la comarca de Allariz-Maceda se ha pasado de 1.285 nacimientos en 1978 a 71 el pasado año. En Baixa Limia la evolución ha sido desde los 149 nacimientos a los 15 del año pasado.
En la comarca de Carballiño se pasó de 367 a 106, mientras que en A Limia el tránsito fue de 303 nacimientos a 92. También cayó drásticamente la cantidad en la comarca de Ourense, desde 2.031 hasta los 837. En O Ribeiro pasaron de 288 nacimientos en el año 1978 y cuarenta años después fueron 60. Por las Terras de Caldelas se contabilizaron 52 nacimientos en 1978 y 9 el pasado ejercicio.
En las Terras de Celanova se pasó 296 a 52 niños, mientras que en Terras de Trives la oscilación fue de 64 a 9. Por lo que respecta a Valdeorras, las cifras van desde los 374 nacimientos a los 107 y la comarca de Verín pasó de 380 niños nacidos hace cuatro décadas a los cien del pasado año. Por último, los concellos que forman parte de la comarca de Viana registraron 126 nacimientos en el año 1978, pero solo 30 cuatro décadas después.
Tampoco la ciudad se salva porque en el citado periodo los nacimientos cayeron un 63,3% desde los 1.691 a los 619.
Entre los planes “Chegou" y la “Tarxeta Benvida"
Los concellos tienen también el estímulo de otras administraciones para completar las iniciativas de estímulo demográfico. La Diputación cuenta con el programa "Chegou", que consiste en una tarjeta de prepago que permite la adquisición de diferentes productos para el recién nacido, que puede abarcar higiene o alimentación durante los primeros compases de la vida del bebé. Por ejemplo, el importe de esta iniciativa en el año pasado ascendió a 339.300 euros y es el tercer año que entra en funcionamiento. La Diputación mantiene un convenio de colaboración con Abanca que permite poner en marcha este plan.
La Xunta, por su parte, dispone de la Tarxeta Benvida. Se trata de una ayuda económica para las familias con niñas o niños nacidos durante el año 2019, "con el fin de contribuir a sufragar los gastos derivados de su crianza durante el primer año de vida", subraya la Consellería de Política Social. Esta ayuda se da a través de esta tarjeta, "cuyo objetivo es adquirir productos como leche y otros alimentos infantiles, pañales, ropa, cunas, artículos de paseo y de viaje, productos de higiene infantil o productos farmacéuticos". Solo se puede usar en farmacias, parafarmacias, supermercados, tiendas de alimentación y establecimientos de puericultura o especializados.
Cuatro concellos de las comarcas de Carballiño y O Ribeiro incentivan la natalidad con ayudas a las familias
La modificación que aprobó el Concello de Boborás de las condiciones exigidas para acceder al cheque bebé permite que se beneficie un mayor número de familias, de tal forma que si antes sólo podían recibir esta ayuda los núcleos familiares con ingresos anuales que no superasen los 11.000 euros, con el cambio se amplía a los 15.800 euros, situándose al mismo nivel que tiene establecido el Estado. Los beneficiarios reciben 500 euros en el momento del nacimiento y 50 euros cada mes durante tres años, lo que supone unos 2.300 euros en total. En el caso del segundo o más hijos lo que ha decidido el concello es subir por cada uno de ellos un 25% de los ingresos contemplados por unidad familiar. "Non descartamos incluso subir máis adiante o límite", apunta la alcaldesa, Patricia Torres. Para ello, también serán más flexibles las condiciones en cuanto al tiempo de empadronamiento, que se reduce.
En San Cristovo de Cea, y con los mismos objetivos, el concello concede por cada nacimiento 1.200 euros, que reparte en 100 euros cada mes durante un año. También en Punxín las familias reciben 700 euros cuando se produce el nacimiento y en la comarca de O Ribeiro, el Concello de Cortegada entrega 300 euros en el primer año y otros 300 al año siguiente. El alcalde, Avelino de Francisco, afirma que "nos cinco últimos anos tivemos 20 nacementos e esto axuda ás familias".
Bande ofrece 1.000 euros para incentivar nacimientos, mientras Celanova o Allariz tramitan ayudas de otras administraciones
El concello de Bande es una de las localidades de la comarca de A Baixa Limia que cuenta con ayudas para impulsar la natalidad. Concretamente, está aprobada una ayuda por nacimiento con un importe total que asciende a 1.000 euros, que son repartidos en dos anualidades. El primer año, al acreditar el nacimiento de un hijo, la familia recibe una partida de 500 euros, recibiendo los otros 500 durante el siguiente año. Los requisitos para acceder a este tipo de ayudas son que cualquiera de los progenitores se encuentre empadronado en el Concello de Bande, como mínimo durante dos años antes del nacimiento del bebé, y que el hijo se empadrone en el concello. Así mismo, desde el consistorio explican que, de forma más indirecta, contribuyen con el pago de las cuotas de la escuela infantil, con una cantidad de entre 4.000 y 6.000 euros dependiendo del número de alumnos.
Por su parte, los concellos de Celanova y de Allariz no cuentan con ayudas propias de impulso a la natalidad. En ambos concellos se tramitan ayudas de la tarjeta "Chegou" de la Diputación de Ourense y "Benvida" de la Xunta de Galicia. Entre los requisitos se encuentran los progenitores empadronados en alguno de los concellos de la provincia, que tengan un hijo durante el año actual, los cuales recibirán una cantidad de dinero acorde a su nivel de ingresos.
El Concello de Manzaneda anuncia que aumentará las ayudas a la natalidad de las familias hasta los mil euros
El alcalde de Manzaneda, Amable Fernández Basalo, subrayó la importancia de las ayudas que concede el Concello por cada recién nacido. Explicó que, en la actualidad, las familias reciben un cheque de 300 euros por cada hijo, una cantidad que consideró escasa el regidor, quien explicó que "no programa a subimos a 1.000 euros". Sus planes verán la luz en los presupuestos municipales del año próximo, según afirmó.
Este Concello no es el único que se decidió a conceder una cantidad en metálico para los recién nacidos, buscando con ello frenar la despoblación. En el oriente provincial fueron varios los que se inclinaron por esta fórmula, siendo el primero el de Larouco, que en la actualidad destina 600 euros a las familias que incorporen un bebé, una cantidad que repartió en dos entregas, de 300 euros cada una.
También lleva tiempo entregando talones a los matrimonios con recién nacidos O Bolo, en un intento de evitar el cierre del colegio público. En este Concello, reciben 540 euros por el primer hijo, 720 por el segundo, 1.200 por el tercero. Los que tienen más de tres hijos reciben 100 euros por cada uno, hasta la mayoría de edad.
Los recién nacidos de Vilamartín aporta 600 euros a los ingresos familiares, procedentes de las arcas municipales. Pero son más los concellos que conceden ayudas, como hacen Chandrexa y A Veiga.
Xinzo y Verín no cuentan con este tipo de ayudas específicas aunque, en el caso de Verín, existe una bolsa social
En las capitalidades de las comarcas vecinas de Monterrei y A Limia los gobiernos locales no contemplan medidas en sus presupuestos para incentivar la natalidad pese a la caída del número de nacimientos. En Verín, tal y como explicó el teniente de alcalde, Diego Lourenzo, no existen estas líneas de ayuda específica pero sí hay una bolsa en el departamento de servicios sociales de la que se pueden beneficiar aquellas familias más necesitadas. "A través deste departamento cónstame que sí que se teñen dado axudas a nais con bebés recén nacidos de Verín", aseguró Lourenzo.
En el caso de Xinzo de Limia tampoco hay incentivos a la natalidad ni línea de ayuda específica. El gobierno local que lidera la socialista Elvira Lama estudia incluir algún tipo de medida en los próximos presupuestos o acogerse a las ayudas que puedan conceder la Deputación de Ourense o la Xunta de Galicia.
En la comarca de A Limia, en el municipio de Baltar funciona desde hace varios años un cheque bebé anual al que ya se han acogido varias familias. El Concello puso en marcha esta iniciativa para incrementar el número de nacimientos y fijar población en el municipio -uno de los requisitos es empadronar al recién nacido en la localidad-. La ayuda se prolonga durante tres años a razón de 1.000 euros al año. Esta medida ha permitido poder mantener el colegio abierto.
