David Regades: "La fábrica de baterías de litio debe estar en el sur de Galicia"

David Regades es desde el 2018 delegado de Zona Franca en Vigo, una de las siete entidades de este tipo que hay en España. Entre otros, tiene como objetivos las infraestructuras como parques empresariales, pero también los servicios a empresas como incubadoras, aceleradoras o servicios de internacionalización. Cree que Ourense debe tener en Zona Franca un aliado estratégico para desarrollar una alianza económica con el sur gallego. Entre los retos, los proyectos que optan a los fondos europeos, el futuro de la automoción y la movilidad eléctrica. La posición geográfica de Ourense y sus comunicaciones son una baza. ¿Qué papel debería jugar Ourense en la Zona Franca de Vigo? ¿Qué nos puede contar más allá de las formalidades de una alianza estratégica del sur de Galicia? Yo creo que la economía del sur de Galicia lleva muchos años trabajando conjuntamente. Es verdad que necesitamos más acciones pero creo que las administraciones de Ourense deberían ser más proactivas para aprovechar este activo. Ourense tiene muchas capacidades que debemos desarrollar. Estamos a dos horas de Madrid en alta velocidad y eso es fundamental. Lleva más tiempo subir a la sierra de Madrid que llegar de Madrid a Ourense. Eso debemos de usarlo para la industria del ocio, para el turismo, pero también para el sector industrial. ¿Cómo trasladar ese mensaje para que cale? Esa cercanía nos pone ante un mercado de cinco millones de habitantes. En un Foro La Región, hace algo más de un año, hicimos un contacto con los empresarios del polígono de San Cibrao y estamos estudiando colaborar porque ellos tenían interés en que el polígono perteneciese a esa red de polígonos de Zona Franca. Los trabajadores de los polígonos de Zona Franca tienen una productividad por encima de los 40.000 euros, cuando la media en Galicia está por debajo de los 30.000. Estamos convencidos que hay que tener dimensión y escala. Tenemos un polígono que hemos desbloqueado después de 20 años, que es el de la Plataforma Logística (Plisan) de Salvaterra, y hoy tiene comercializado el 20% del suelo. Contempla el proyecto de Albo, con cerca de 300 trabajadores, y otro es el de Beta Implants, que generará cerca de 200 empleos. Yo creo que Ourense, el sur de Galicia, unidos a Vigo tenemos que ser capaces de atraer tecnología e innovación, incluso del norte de Europa, y aquí tenemos mucha calidad de vida y mucho valor añadido para ser capaces de captar y retener talento. En Ourense hay un campus muy importante, con la Facultad de Aeronáutica, y ahí debemos jugar un papel muy importante. Esas sinergias a día de hoy están poco aprovechadas. ¿Qué empresas ourensanas están interesadas en instalarse en la Plisan? Tenemos multitud de empresas interesadas, es cierto que mayoritariamente del sector de la alimentación vinculadas con la pesca, pero también otras porque está muy bien conectada a través de la autovía y ferrocarril, y esas son potencialidades que tenemos que aprovechar. En estos momentos, viniendo desde Vigo a Ourense o cogiendo el AVE hasta Madrid se tarda menos que en avión. Eso hay que ponerlo en valor. Pero, insisto: ¿detecta esa masa crítica, ese interés empresarial en Ourense? Yo lo veo más con los empresarios del polígono, supongo que por la cercanía industrial con la Zona Franca de Vigo. Pero también hay una empresa ourensana que se ha sumado a nuestro Manifiesto De Intenciones (MDI) para optar a la fábrica de baterías que es Unvi. Es una gran iniciativa, una gran empresa, y esa es la senda que tenemos que seguir. Tener producción hoy en Ourense es complementario con industrias establecidas en el área de Vigo. En cuanto a la automoción, con el coche eléctrico siendo una realidad y la importancia del sector en Ourense, ¿qué pasos hay que dar, por ejemplo, de cara a los fondos europeos? Ahí Ourense debe jugar un papel importante. El otro día estábamos en Braga y veíamos como el propio presidente portugués había dado órdenes para colaborar en el proyecto de fábrica de baterías en el que estamos trabajando en Zona Franca. Ellos tienen litio, que se desplazaría por ferrocarril, y ahí la entrada tiene que ser Ourense. Nosotros hemos querido hacer una apuesta por el litio y también por el hidrógeno. Las ubicaciones hay que ir viéndolas. Si queremos afianzar la población al territorio la gente tiene que tener comunicaciones y nuevas tecnologías. En esas revoluciones tenemos que estar porque eso nos va hacer competitivos y vivir mejor. Nosotros somos una herramienta para las empresas, en Vigo Activo estamos ya apoyando empresas de Ourense y queremos apoyar a más. Estamos confiando la salida del túnel del covid a los fondos europeos. ¿No es mucho pensar que Europa nos va a sacar las castañas del fuego? Todas las MDI que presentamos las planteamos como una oportunidad y pedimos al Gobierno de España que la mire, pero aunque no hubiese fondos nosotros ya habíamos hablado, por ejemplo, de la fábrica de baterías de litio para la automoción. Necesitamos fábricas de motores eléctricos, de baterías, y ahí hay una oportunidad que debemos aprovechar. ¿Somos conscientes de la potencia del sector de la automoción en el sur gallego? No se empezó a hablar de que hacemos el 25% de los vehículos de España hasta que lo dijimos en Zona Franca. Son necesarias cinco fábricas de baterías si queremos mantener los dos millones de coches que se fabrican en España. Si esos coches serán eléctricos el día de mañana serán necesarias esas cinco fábricas y el sur de Galicia tiene condiciones. ¿Qué tendría que ocurrir para que la fábrica de baterías no sea un Bienvenido Míster Marshall? Tenemos que dar todo el apoyo para que la iniciativa privada tenga esas autopistas de comunicación para establecerse. Necesitamos un socio industrial y tenemos que decirle que tiene el apoyo de un proyecto tractor para optar a los fondos europeos. La innovación y la tecnología tiene que quedarse en Europa, por eso uno de nuestros socios estratégicos es el Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia. Pero, con o sin fondos europeos, tenemos que ser capaces de apoyar los proyectos que presentamos. ¿Qué ocurrirá con el hidrógeno? Nosotros vamos a hacer sí o sí el Centro Hidrogenera en Vigo. Si hay fondos europeos vamos a ser más competitivos, pero de todas formas seremos un referente en ese proyecto a través de energías verdes para que sea hidrógeno verde y no azul o gris. ¿Dónde tendría que estar la fábrica de baterías de litio? Yo creo que la fábrica de baterías tiene que estar en el sur de Galicia. La Plisan sería un buen sitio, pero tendría que ser en el sur de Galicia. Otros proyectos, como el del vehículo conectado, tanto la Zona Franca de Barcelona como de Vigo, no puede hacer proyectos por minifundios . Entonces tenemos que juntarnos, buscar un socio industrial, cogimos el norte peninsular, que es donde se fabrican más automóviles y presentamos ese proyecto. No podemos ir con otra estrategia, tenemos que ver las oportunidades. Por ejemplo, en Portugal tenemos un complemento. Portugal tendrá una ventaja con los fondos europeos porque siempre habrá proyectos transfronterizos que tengan buena puntuación. ¿El norte de Portugal es un socio o un competidor? Para mí es un socio. Lo que tenemos que seguir apostando es porque los centros tecnológicos sigan estando en Galicia, pero tenemos que contar con ellos como aliados. Pero Portugal también puede querer ese papel. Pero son papeles complementarios. Siempre se decía que las empresas se iban a Portugal y cuando nosotros pusimos suelo a su disposición se han quedado. Tenemos que generar suelo industrial de calidad para afianzar las empresas. Conjuntamente tenemos un mercado potencial de cinco millones de habitantes. David Regades, durante el Café de redacción (Foto: Óscar Pinal). “El alcalde de Ourense nunca se puso en contacto conmigo" David Regades es también el secretario general del PSOE en Pontevedra, lo que le da también una visión ideológica a sus reflexiones. Espera que el congreso gallego que el partido celebrará a final de año o comienzos del 2022, sea una apuesta por la ilusión. Como socialista lamenta que no haya un gobierno de su partido en Ourense y le preocupa la imagen que trasciende del Concello de Ourense y su alcalde, Gonzalo Pérez Jácome. Le pido una valoración política. Hay muchas empresas industriales en riesgo, con un entramado que parece estar en peligro. La pandemia aceleró cambios pero en Galicia no estamos en una mala situación porque Pontevedra y A Coruña están batiendo récords de exportación. El textil y el automóvil están exportando, también aquí en Ourense. Las administraciones debemos crear las condiciones para que se puedan desarrollar, pero no mantenerlas artificialmente. Lo importante son los trabajadores, el talento y si nos descapitalizamos llevando ese talento fuera va a ser difícil recuperarlo. Hay gente preocupada por el futuro de Ence para salvar una empresa en riesgo. ¿Cuál es su sensación? A mí me llama mucho la atención que el Gobierno de Feijoo no haya presentado un proyecto para Ence a los fondos europeos de recuperación. Ence tiene que quedarse en la comarca de Pontevedra, pero no puede seguir estando en la ría. El modelo industrial de los próximos años va a ser muy respetuoso con el medio ambiente, con mucha innovación y mucho valor añadido. Ence no puede ser solo una fábrica de papel, habrá que ver otros materiales y otros desarrollos. Como secretario general del PSOE en la provincia de Pontevedra, ¿cómo enjuicia la situación del partido? Falta mucho para el congreso autonómico, en un horizonte de final de año. El que lidere el partido tiene que ser capaz de atender al capital importantísimo que son nuestros militantes o nuestras casas del pueblo. Gobernamos la mayoría de los ayuntamientos y tres de las cuatro diputaciones y eso debe visualizarse. No sé quién tiene que hacerlo, pero hay que optimizar esos recursos. Gonzalo Caballero tiene muy buenas condiciones, es cuestión de recuperar la senda. Hay ilusión y un proyecto distinto al del PP y a Feijoo. Aquí, en Ourense, con un gobierno más sólido, mayoritario, la propia Zona Franca tendría una relación que nos permitiría hacer muchas más cosas. El alcalde de Ourense nunca se puso en contacto conmigo. Una herramienta tan importante como esta ni siquiera se llama a su puerta para conocerla. Estoy convencido que si el alcalde fuese del PSOE eso no sucedería. ¿Qué opinión tiene sobre la corporación de la ciudad, su gobierno y la imagen que trasciende? Hay una primera fuerza que es el PSOE y hay que facilitarle estabilidad a Ourense. Es una idea que tengo no porque sea secretario general del partido en Pontevedra, yo creo que es una opinión de estabilidad, es una idea pensando en los hombres y mujeres de Ourense. No puede haber tanta crispación, debe haber una línea sólida y creo que aquí no está pasando.