La Policía Nacional desarticuló dos puntos de venta de droga cercanos a centros educativos de la ciudad en 2019, dentro del Plan Director para la convivencia y la mejora de la seguridad en los centros educativos. El proyecto, que arrancó en el año 2007, tiene como objetivo la prevención de conflictos en las aulas y la promoción de una convivencia pacífica. En la provincia, 140 centros forman parte del Plan Director –más del 80% de la comunidad educativa ourensana–, que beneficia a alumnos, profesores y padres.
Representantes de la Delegación del Gobierno, Policía Nacional, Guardia Civil, Inspección Educativa de la Xunta y Unidad de Violencia de la Subdelegación del Gobierno se reunieron ayer en la ciudad para constituir la comisión provincial del proyecto. "Queremos que sexa moito máis eficaz e efectiva, e tamén convidaremos as asociacións de nais e pais a participar nas xuntas de seguridade, para que falen das súas preocupacións", señala Emilio González Afonso, subdelegado del Gobierno en Ourense.
Nuevas tecnologías
El abuso de las nuevas tecnologías copa la mayor parte de las conferencias del Plan Director como una de las principales luchas de la comunidad educativa, junto con el acoso, el juego online y las apuestas. "Hai moitos rapaces que van a clase sen durmir por xogar durante toda a noite a xogos de rol", apunta Manuel Regueiro, director del área de Alta Inspección de Educación de Galicia. En lo referente a acoso en las aulas, durante 2019 "non foi moi significativo". "Tivemos un caso dunha familia que presentou varias queixas por este motivo", dice Regueiro.
El auge de las casas de apuestas en la provincia también preocupa, ya que cada vez son más los jóvenes que entran en contacto con este tipo de hábitos. "É unha problemática que o propio goberno acaba de tratar: instalarse ao lado dos centros escolares e ademas en horarios lectivos, iso non se vai permitir", apunta.
“Se necesitan más orientadores"
Desde la Federación de Anpas públicas (FAPA) Ourense, José Antonio Álvarez Caride pone de manifiesto la carencia de profesionales de orientación en los centros educativos. "Se necesitan más orientadores para una atención más personalizada, su trabajo permite detectar antes problemas en el aprendizaje, así como conductas. Actualmente, hay centros en los que hay un orientador para cada 600 alumnos", señala Caride. Los padres también piden tocar temas no incluidos en el Plan Director, como la anorexia o la bulimia: "Pensamos que hay temas que solo son de casa, pero no es así, también se manifiestan en los centros educativos". El proyecto, por el momento, abarca temáticas como el uso de nuevas tecnologías, el acoso, la violencia de género o el consumo de drogas y alcohol, aunque el subdelegado ya adelantó que se adaptará a las nuevas necesidades.
