SUCESO

Detenido por apalear a su perro en San Cibrao

Golpeó al animal, que fue auxiliado por un vecino, con un palo hasta causarle heridas de gravedad

 

Un vecino de Reboredo, en el municipio de San Cibrao, identificado como O.M.D. y de 36 años, fue detenido por la Guardia Civil como presunto autor de un delito de maltrato animal al ser sorprendido apaleando a un perro al que le ocasionó heridas de carácter grave.

La agresión se produjo el pasado  miércoles en las inmediaciones de su domicilio. Un particular alertó de la agresión a la Guardia Civil, alarmado por los aullidos del can y al comprobar que el detenido lo estaba golpeando violentamente. El animal no tenían forma de escapar del lugar en que se encontraba. Además, según fuentes del instituto armado, tras los primeros golpes quedó ya malherido y con escasa movilidad.

Una patrulla que se encontraba a escasa distancia del pueblo acudió de inmediato al lugar y procedió a la detención del presunto agresor, que quedó en libertad tras prestar declaración en el juzgado de guardia, aunque como investigado por un delito de maltrato animal.

Mientras, la Guardia Civil mantiene abierta una investigación para esclarecer los motivos de la agresión y si el perro tenía la correspondiente documentación y había pasado los controles sanitarios. El detenido argumentó, según pudo saber este periódico, que  el animal no era de su propiedad y que había intentado atacarlo cuando caminaba por la vía pública.

Auxilio

Esta versión no acaba de convencer a los investigadores que en los últimos días recabaron información entre los vecinos  y determinar si el perro venía siendo maltratado de forma continuada. 

El can fue auxiliado por un vecino, que se puso en contacto con el Servicio de Emergencias 112 con el objetivo de que el Concello o alguna protectora de animales se hiciera cargo de él y poder curarle las lesiones que presentaba en diferentes partes del cuerpo.

La Guardia Civil mantenía ayer  total mutismo sobre la suerte que corrió el perro, lo que impidió conocer sí había sido entregado a una perrera o dado en adopción a un vecino. 

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