La Policía Local detuvo en la tarde de ayer a un vecino de la ciudad en la estación de servicio de la calle Progreso por un delitos de desobediencia y resistencia. Los hechos que motivaron la detención ocurrieron sobre las seis de la tarde cuando un hombre accedió a las instalaciones a comprar dos cervezas, pero no para llevarse a su domicilio en el que debía permanecer. Su intención era consumirlas en el interior de la estación de servicio, cuestión que le fue denegada.
Pero el detenido no obedeció y, según fuentes policiales, descorchó su cerveza al tiempo que intentaba acomodarse como si de un bar se tratara. Al lugar acudió de inmediato una patrulla de los agentes locales, que comprobaron que el más tarde detenido ya había ingerido más alcohol -estaba en estado de embriaguez- ante lo que se dispusieron a identificarlo al tiempo que le informaba de que debía permanecer en el interior de su domicilio debido a la actual situación de emergencia.
Pero el afectado hizo caso omiso de las instrucciones que le dieron lo agentes, ante lo que procedieron a su arresto por un delito de desobediencia. También opuso resistencia a la hora de ser identificado.
Según las mismas fuentes, se trata de un vecino reincidente, al que sancionaron, tras montar ya altercados muy similares en los últimos días en dos supermercados de la ciudad. A estos últimos negocios también accedió a comprar alcohol con la intención de consumirlo en el interior.
