Finge ser víctima de una estafa y solicita al banco el reintegro del dinero

photo_camera Imagen de archivo.

El detenido denunció cargos por un importe de 600 euros que él no había autorizado y solicitó al banco el reintegro del dinero

 

Agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional han detenido a un vecino de Ourense de 38 años por simular ser víctima de una estafa y solicitar al banco el reintegro del dinero.

Según informa la Policía Nacional, el hombre denunció en octubre de 2020 haber sido supuestamente víctima de una estafa al descubrir en su cuenta bancaria cargos por un importe total de más de 600 euros, que dijo no haber autorizado.

Tras realizar la investigación, "se pudo acreditar no sólo que había sido él mismo quien realizó los cargos, sino que tras interponer la denuncia consiguió que la entidad bancaria le reintegrase el importe íntegro denunciado", han destacado las mismas fuentes.

"La dinámica exitosa de esta persona le llevó a realizar la misma operación en el mes de noviembre, denunciando otros cargos supuestamente fraudulentos en la misma página web, esta vez por un importe superior a los 300 euros", ha señalado la Policía.

De este modo, con la información conseguida por el grupo de investigación, el denunciante terminó detenido, acusado de simulación de delito, al denunciar falsamente haber sido víctima de un hecho delictivo no ocurrido, y de estafa, al reclamar a la entidad bancaria el reintegro del importe que indebidamente había denunciado.

La Policía recuerda que la simulación de delitos "es una conducta recogida y tipificada en el artículo 457 del Código Penal", que textualmente dice que "el que, ante funcionario judicial o administrativo, simulare ser responsable o víctima de una infracción penal o denunciare una inexistente, provocando actuaciones procesales, será castigado con la multa de seis a doce meses".

En cuanto a la estafa las conductas constitutivas de estos delitos están recogidas y tipificadas en los artículos 248 a 251 bis del Código Penal y las penas aparejadas a las mismas pueden ser de prisión de seis meses a tres años, si la cuantía de lo defraudado excede de 400 euros, y de multa de uno a tres meses si no superan dicha cantidad.

La Policía ha resaltado que en los últimos años "se han visto incrementadas notablemente esta serie de conductas en paralelo con el uso de Internet y las nuevas tecnologías".

Al respecto, se ha elevado el número de denuncias en las que una persona, tras realizar determinados cargos en Internet con su tarjeta bancaria, o tras darse de alta en alguna oferta puntual que le resulta interesante en ese momento, posteriormente denuncia dichos cargos como fraudulentos para recuperar el dinero invertido. "Esto puede suponer incurrir en los delitos expuestos más arriba con sus penas correspondientes, constituyendo en muchos casos una acumulación de los delitos de simulación de delitos y estafa", avisa.

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