Los concellos cerraron el tercer trimestre con casi 19 millones pendientes de pago de facturas
Los concellos ourensanos tienen todavía trabajo por delante para cumplir con sus proveedores. Así se constata en el último balance publicado por el Ministerio de Hacienda, con datos cerrados del tercer trimestre del ejercicio, que recoge que la factura local aumentó más de un 9,2% en comparación con el mes de septiembre del año anterior, con 18,9 millones pendientes de pago, 1,6 más que en 2016.
La causa de este incremento se explica por los problemas que ha tenido en los últimos meses el Concello de Ourense para dar salida a las facturas pendientes con sus proveedores, con dificultades para consensuar con la oposición las modificaciones de crédito necesarias para ello. La capital de la provincia tenía, en septiembre, más de 9,6 millones pendientes de tramitar, mientras que un año antes esa cifra era de 6,9.
Por su parte, el resto de concellos que ha remitido la información solicitada por el departamento dirigido por Cristóbal Montoro ha conseguido reducir la factura, dando salida a distintos pagos que han permitido que su deuda pendiente caiga desde los 10,44 millones contabilizados en septiembre del año pasado hasta los 9,3 del actual.
Esta cantidad, sin embargo, no es responsabilidad de 13 municipios, que tal y como refleja la información comunicada al Ministerio de Hacienda, tienen liquidada, o deben solo unos céntimos, la deuda con sus proveedores. Se trata de Lobeira, Paderne de Allariz, A Peroxa, Sandiás, Trasmiras, Verea, Vilamarín, Vilar de Santos, Vilariño de Conso, Cenlle, Coles, Entrimo y O Bolo.
Fuera de la ciudad, las mayores cantidades en términos absolutos corresponden a Xinzo (por encima del millón de euros), Allariz (579.000 euros), O Barco (569.000) o Nogueira de Ramuín (500.000).
Plazos dispares
Más de la mitad de los concellos de la provincia, un total de 49, se ciñen a los plazos que establece la legislación para hacer frente a las facturas con sus proveedores, un máximo de un mes. Destacan 25 municipios que tramitan sus pagos antes de que el cronómetro empieza a contar. Entre ellos, Vilamarín, A Peroxa, Montederramo, Oímbra, Castrelo do Val o Baltar, lo realizan más de 20 días antes.
Por el contrario, hay casi una veintena de localidades que tienen un período medio de pago por encima de los 100 días. Reseñable es el caso de Os Blancos, que ha aprobado recientemente la intervención de su gestión por la Diputación para evitar la quiebra finaciera y que lidera el ranking con 683 días, en lo alto de los ayuntamientos españoles.
El comportamiento con los proveedores también es manifiestamente mejorable en concellos como Rairiz de Veiga (495 días), Trives (430), A Bola (408) o Porqueira (407). Entre las principales cabeceras de comarca, los datos son negativos en Xinzo (226 días de media) Ribadavia (138) o Allariz (84).
