TRIBUNALES

"Le di dos puñetazos dentro del coche pero no en la calle"

Acusado de agresión en Ourense
photo_camera Nicolae G., ayer en la Audiencia provincial.

Un acusado de tentativa de homicidio dice que la víctima se cayó por sí sola y se golpeó la cabeza

La acusación por tentativa de homicidio por parte del ministerio fiscal y de la propia víctima quedó diluida en la primera jornada del juicio que comenzó ayer en la Audiencia de Ourense, debido a las distintas versiones de un mismo hecho -discusión y posterior pelea- y las contradicciones de los testigos, incluido el denunciante, con respecto a sus declaraciones durante la instrucción penal. Nicolae G. se enfrenta a una petición inicial de seis años de prisión por tentativa de homicidio, aunque será hoy cuando el fiscal y la acusación particular decidan si ratifican esa calificación o la cambian por lesiones graves.

El inculpado negó que pegase en la calle al hombre que insultó a su novia en la madrugada del 13 de octubre de 2015 y que, según su versión no confirmada por nadie más, intentase atropellarla. Reconoció que le dio "uno o dos puñetazos" pero en el interior del vehículo de la víctima, que lo invitó a subir para ir a tomar una cerveza juntos, cuando escuchó palabras subidas de tono. "Me dijo, ves a esa puta -en alusión a su novia, que caminaba por la avenida de Buenos Aires-, la voy a follar a ella y a sus putas hijas", relató Nicolae a preguntas del fiscal. A continuación, según esa versión, "se me puso todo negro" y lo golpeó. Nada más. "No tuve intención de matarlo, Dios me libre", enfatizó.

El inculpado asegura que arrojó las llaves del coche y salió del mismo, y que la víctima quedaba fuera del coche y en pie. El resto de testigos, por contra, incluida la que fuera su pareja, no lo confirmaron (dijeron que presenciaron cómo se desplomaba). Tanto la exnovia como dos amigas que vieron los hechos relataron en el juicio que el denunciante salió del coche, caminó unos pasos y se cayó hacia atrás, golpeándose la cabeza. Eso sí, sin que interviniera el acusado.

La propia víctima, pese a que a su mujer le contó que sí hubo golpes fuera cuando ocurrieron los hechos, ayer dijo que no. "Solo me agarró por la sudadera y me la rompió", dijo. A continuación, caminó unos 200 metros aturdido antes de caer hacia atrás, exculpando al encausado de esa acción. Circunscribió únicamente la agresividad de Nicolae al interior del turismo. "Entró en mi coche y comenzó a pegarme puñetazos en la cara y la cabeza, hasta rompió el espejo retrovisor y me dio con él", relató. A su entender, las intenciones no eran buenas: "Me dijo: 'Antes de irte te mato".

La víctima contradijo también a todos los testigos en cuanto al nombre del bar de la avenida de Buenos Aires en el que germinó el pique del investigado con el lesionado por insultar a su novia. "La discusión no fue en el bar Carballo sino en O Largueiro", explicó a la sala, pese a que el dueño del primer negocio aseguró cuando testificó que la discusión y el intercambio de insultos entre el denunciante y la novia fue en su bar. "Él le llamó puta y ella, tonto y subnormal", explicó.

Por su parte, la expareja situó la pelea en el interior del coche de la víctima, quien, según ella, la seguía despacio cuando ya se iba para casa -"solo se enzarzaron allí"-. La testigo también confirmó las amenazas que relató el inculpado.

Las dos hermanas que antes habían estado en la terraza del bar y presenciaron la pelea en el coche matizaron sus declaraciones iniciales. Una cambió el verbo "agredir" por "bracear" y la otra sustituyó "pelea" por "discusión". 

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