La comisión del Código Ético, de la que se ausentó la oposición, finalizó los trabajos y se debatirá en el próximo pleno.
El Código Ético y de Conducta de la Diputación de Ourense finalizó ayer su fase de redacción después de que el portavoz del grupo provincial del PP, Plácido Álvarez, y el presidente provincial, Manuel Baltar, mantuviesen la quinta y última reunión de la comisión de elaboración del texto, de donde salió una versión casi definitiva que será hecha pública una vez pasada la Semana Santa.
Tal y como sucedió desde el primero de estos encuentros, el popular Plácido Álvarez fue el único portavoz de los tres grupos políticos del ente provincial que se presentó a la reunión, después de que el PSdeG y el BNG decidiesen no formar parte de la elaboración de este Código Ético ante la negativa del PP a contemplar el cese de aquellos cargos políticos que hubiesen sido imputados. Álvarez entregó a Baltar una relación de sugerencias y aportaciones al contenido del texto.
El propio Manuel Baltar avanza que algunos de los cambios derivados de estos encuentros con el portavoz de su partido tienen que ver con la duración de la abstención profesional de los diputados provinciales una vez finalizase su etapa en el cargo. "El texto inicial establecía un año de abstención, y hemos decidido aumentarlo hasta los tres", resume el presidente el incremento del periodo que limita la incorporación de los diputados salientes a empresas que fueran contratadas por la Diputación durante su mandato.
Otro de los aspectos que acordaron Baltar y Álvarez fue la supresión de uno de los integrantes del Comité de Ética, encargado de velar por el cumplimiento de las directrices del documento. En concreto, este órgano no contará con la presencia de un funcionario del cuerpo de letrados de la Xunta, que estaba incluido en la propuesta inicial. Además, el presidente provincial señaló que se ha añadido al texto la retransmisión en directo, a través de la web de la Diputación, de las aperturas de los procedimientos de contratación, "lo que hará que los empresarios no tengan por qué acercarse a la Diputación", sino que podrán hacerlo desde su propia conexión a internet, lo que "simplifica trámites y refuerza aún más la transparencia de los procesos".
A falta de una última revisión por parte del propio Baltar a cuestiones puntuales "de carácter jurídico" del texto, la versión definitiva del Código Ético y de Conducta de la Diputación será sometida a debate en el próximo pleno provincial ordinario, que se celebrará el miércoles, día 30. "Estamos satisfechos con el trabajo realizado durante la elaboración, que procede del estudio y el análisis de documentos similares tanto del ámbito nacional como el internacional", afirmó Baltar.
Un código en contra de los regalos
La elaboración de un código ético fue debatida y aprobada -con los votos a favor de PP y PSdeG y la abstención del BNG- en el pleno provincial del pasado mes de febrero. La más sonora de las medidas que contempla el documento es la prohibición a diputados provinciales y personal de la propia Diputación de recibir o dar cualquier tipo de regalo. Además, el texto contempla la abstención profesional de los diputados salientes a empresas relacionadas con el ente provincial (ahora ampliado de uno a tres años), la diferenciación entre las declaraciones de carácter partidista e institucional, la no inclusión de nombres en el descubrimiento de placas conmemorativas en edificios públicos o la celebración, en el mes de noviembre, de un debate sobre el estado de la provincia.
La oposición se guarda sus réplicas al documento para el pleno provincial
Desde la presentación de la primera versión del Código Ético, PSdeG y BNG criticaron con dureza la permisividad de Baltar con los cargos imputados, motivo que rompieron desde un principio las negociaciones para la elaboración del texto.
El portavoz socialista, Ignacio Gómez, avisó que "o que lle temos que dicir xa llo diremos no pleno" e insistió en que Baltar "non nos vai dar clases a nós sobre como se debe comportar un político". "A Deputación é unha institución que non se caracteriza pola ética e a transparencia", criticó Gómez.
Manuel Baltar lamentó la negativa de la oposición a entrar en la elaboración del Código Ético después de que "ni PSdeG ni BNG hubiesen votado en contra" en el acuerdo plenario que dio el visto bueno a la puesta en marcha de la redacción del documento. "Esperaron hasta el último día después de haber votado a favor para justificar la no presencia en los trabajos de la comisión", criticó el presidente provincial.
