La gerente del centro, Eloína Núñez, que atribuye el conflicto a la reorganización de las guardias, se ofrece a dialogar y a la conciliación para evitar el paro de 24 horas de los facultativos
El sindicato médico Cesm-Omega ha llamado a los facultativos del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) a una jornada de huelga que se prolongará durante las 24 horas del martes 13, como respuesta al que consideran un "deterioro asistencial y desmotivación de los facultativos, el desprecio de la Xerencia a los profesionales y las continuadas promesas incumplidas para el buen funcionamiento del Complexo".
La organización ha cumplido con lo acordado en la asamblea celebrada a finales de septiembre, en la que también se pactó la elaboración de una tabla de reivindicaciones que la dirección deberá consensuar con los profesionales. Tal como explicaron en la convocatoria de huelga, si no se alcanza un acuerdo entre la Xerencia y los facultativos, se convocarán en el futuro nuevas jornadas de paro, que podrían desembocar en una huelga indefinida.
A lo largo de los últimos meses, el CHUO está siendo escenario de concentraciones de protesta contra la situación laboral y contractual del Complexo Hospitalario y contra la gestión de su gerente, Eloína Núñez. Todos los viernes –como sucedió ayer–, el día amanece con representantes de la comisión de centro a las puertas del recinto reclamando medidas drásticas y urgentes para mejorar la atención del paciente.
La convocatoria de esta huelga, difundida ayer a los medios de comunicación, ha recibido una respuesta conciliadora por parte de la Xerencia de gestión de la sanidad pública ourensana, incluido el CHUO, que dirige Eloína Núñez. "A dirección deste Complexo desexa facer pública a súa disposición ao diálogo, para evitar que este paro afecte á actividade asistencial e especialmente aos pacientes", manifestó a través de un comunicado.
No obstante, desde la dirección del CHUO lamentan la actitud de Cesm-Omega, a la que acusan de plantear dentro de esta lista de reivindicaciones "aspectos que nin tan siquera se chegaron a abordar nas comisións de centro", o incluso, sostienen, sobre los que ya existía un compromiso previo de acuerdo. Desde la Xerencia achacan como origen del conflicto las discrepancias surgidas tras la reorganización de las guardias del área médica, que se realizaron en junio.
Sin embargo, la dirección actuará en consecuencia. Para el próximo martes, día 6, ha convocado a los responsables de los servicios y secciones del centro para conocer de primera mano sus opiniones. "As portas para o diálogo están plenamente abertas para o conxunto de profesionais", reiteraron.
