El edificio de A Ponte amenazado de derribo espera aún por el TSXG

Los vecinos del número 36 de la avenida de As Caldas continúan pendientes de que el Tribunal Superior de Xustiza comunique al Concello si el proyecto de demolición parcial del edificio debe ejecutarse tal y como está realizado en la actualidad o si, por el contrario, es necesario redactar uno nuevo que se ajuste a la realidad del inmueble y a la extremada complejidad de la obra. Así quedó de manifiesto en la reunión mantenida ayer entre la concejala de Urbanismo, Áurea Soto, y representantes de los propietarios afectados.
De esta forma, el corte de suministro de agua y luz no se producirá hoy, tal y como estaba previsto inicialmente, a la espera de la decisión del tribunal. El Concello planteó la posibilidad de volver a redactar el proyecto de demolición con el objetivo de garantizar la seguridad en la ejecución de la obra, avalado además por un experto que ratifica tal necesidad debido a las escasas dimensiones del patio de luces en el que debe acometerse el derribo de la parte posterior del inmueble. Todo esto, además, teniendo en cuenta que el primer proyecto de demolición fue realizado sin que los técnicos pudieran acceder al interior del edificio.

En todo caso, la voluntad del Concello y los propietarios es ejecutar la sentencia judicial que ordena el derribo parcial del edificio -la licencia fue anulada en 1992- con la máxima seguridad para evitar desperfectos en los edificios colindantes.

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