La cantidad de agua acumulada en la provincia es, sin embargo, un 8% menor que la media histórica
La acumulación de precipitaciones de los meses de febrero y marzo, que tuvieron la guinda final con la llegada de la borrasca Félix el pasado fin de semana, ha cambiado de forma notable el panorama de los embalses de la provincia. Según datos dados a conocer ayer por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, se encontraban al 65,28 % de su capacidad máxima, un 9,23 % más que la semana anterior. Este volumen de agua acumulada es un 2,35 % mayor que la cantidad embalsada hace un año, cuando alcanzaba el 62,93 % del total posible.
A pesar de este notable incremento de las reservas en los últimos siete días, el agua acumulada por los embalses de la provincia sigue siendo un 8,93 % menor que el llenado promedio histórico en estas fechas del año, que se sitúa en el 74,21 %.
El embalse de Chandrexa, con un 97,43% de su capacidad ocupada es el que tiene mayor porcentaje de acumulación de agua, seguido del de San Martiño, en tierras valdeorresas, con un 97,18%, y el de Castrelo, con 95,8%. La presa de Velle acumulaba el fin de semana 14,71 hectómetros cúbicos, un 86,60% de su capacidad.
El efecto de "Félix" se dejó también sentir en los caudales circulantes, que aumentaron en todos los puntos de control de la Confederación hasta valores similares o por encima de los normales para esta época del año. Únicamente la estación del río Sil en O Barco de Valdeorras presenta un caudal ligeramente por debajo de la media.
En el presente año hidrológico 2017/18 -que comienza el 1 de octubre de 2017-, la precipitación acumulada media en la provincia de Ourense a día 11 de marzo de 2018 ha sido de 709,9 litros por metro cuadrado, un 4 % por debajo de la media histórica, que es de 740,3 litros por metro cuadrado. En la última semana se registraron 110,8 litros por metro cuadrado. Mensualmente pueden destacarse los meses de octubre, noviembre y enero como secos, y diciembre como húmedo.
