Cuando la iniciativa Gaiteiro de la Catedral cumplía un mes, el músico Fernando Molpeceres fue el encargado de hacer los honores y tocar el himno provincial en recuerdo de las víctimas de la pandemia.
"Ya cuando me lo ofrecieron fue ilusionante", recuerda Molpeceres,"y durante la interpretación de la pieza me sentí emocionado, por las víctimas del covid y por ser en Ourense, que para mí significa algo especial, y además en el entorno maravilloso de la catedral. Soy madrileño de nacimiento, pero 3 de mis 4 abuelos y mi madre eran gallegos".
"Cualquier iniciativa que recuerde a las víctimas y ponga en valor el trabajo de tanta gente ya es de destacar, pero que además se haga en la catedral y con gaita tiene un sabor muy especial", celebra. Molpeceres ha mostrado su agradecimiento, entre otros, sus compañeros de la banda Lume de Biqueira, "que son parte de mi vida", destaca.
"De adolescente empecé a tocar guitarra flamenca sin pretensiones, y tuve incluso la suerte de aprender de grandes maestros. Pero a mí la música que más me gustaba era la celta. Me acerqué a la la gaita para quitarme estrés laboral, y para mí ya es tan necesaria como respirar", reconoce el músico.
Molpeceres se ha prejubilado y dedica su tiempo libre a interpretar. También investiga y escribe artículos sobre el mundo de la gaita, que defiende como el instrumento más representativo del continente europeo, con manifestaciones en España, Francia, Reino Unido, Irlanda o Italia. Más allá de las fronteras europeas, Molpeceres ha indagado sobre la historia de la gaita en la India o el norte de África.
