La casa rectoral de San Eusebio, en Ferreiros (Coles), ya ha finalizado las obras para convertirse en vivienda de turismo rural en la que se integran alojamiento, bodega y sala de catas, en un entorno único, una casa del siglo XVIII, rodeada de viñedos.
La bodeguera de Ávila Maite Maestre y su pareja, Raúl García, han recuperado para el enoturismo la rectoral de San Eusebio, con la creación de la Adega Ferreiros ya en verano y ahora, tras la inauguración celebrado ayer, una viviende turismo rural.
La casa se compone de siete dormitorios, varios salones, bodega, jardín y sala de catas. Todo en un entorno natural privilegiado, en un edificio histórico para que los visitantes puedan realizar actividades relacionadas con el mundo del vino.
Ofrecerán estancias con catas de vinos para dar a conocer el trabajo de la Adega Ferreiros,una bodega semi enterrada y de reciente construcción, donde se pueden elaborar hasta 70 mil litros de vino.