El encargado del bar y un amigo persiguieton al acusado y lo retuvieron hasta que llegó la policía
Cristian R.F., de 27 años, se enfrenta a un nuevo proceso judicial por un robo con fuerza en las cosas en grado de tentativa, un delito por el que llegó a disculparse al verse sorprendido por un empleado del negocio, un local de hostelería. La vista estaba fijada para ayer en el Penal 1 pero quedó aplazada.
El inculpado, según el escrito de acusación de la fiscal, entró en la madrugada del 19 de mayo de 2015 a la cafetería Arábica de la calle Valle Inclán. Para ello, según dice la acusación pública, levantó la persiana exterior del local, que estaba bajada pero sin cerrar con llave y forzó la puerta acristalada de acceso al establecimiento, bloqueada desde el interior por el encargado del bar, quien se encontraba en la cocina contando la recaudación.
El ministerio fiscal sostiene que el acusado se dirigió al interior de la barra, retiró la pantalla de la caja registradora y manipuló el cajón donde se guardaba el dinero. Pero, según añade, Cristian R.F. fue sorprendido por el encargado, momento en el que le pidió perdón antes de darse a la fuga. El inculpado fue detenido por la policía nacional en tanto que fue perseguido por el empleado del bar y un amigo, quienes lo retuvieron hasta la llegada de los agentes.
La fiscal reclama una pena de 11 meses de prisión porque le aplica la agravante de disfraz ya que llevaba una gorra con visera que le ocultaba parcialmente el rostro.
