En el marco del día mundial de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), celebrado ayer, los neumólogos ponen al acento en que se trata de una patología prevenible. En el 90% de los casos, la enfermedad tiene su origen en la inhalación del humo del cigarrillo, por lo que no fumar se convierte en la mejor arma para combatirla. "Es fundamental para evitar la evolución tan mala de esta patología", apunta Joaquí Lamela, neumólogo de El Carmen.
Los sanitarios calculan que en torno a 25.000 ourensanos padecen la enfermedad. "Aunque está infradiagnosticada, más del 70% de los pacientes que tienen EPOC lo desconocen", explica Hugo Gómez, neumólogo del CHUO e integrante del grupo GalEpoc –la sección gallega de especialistas dedicada a esta dolencia–. En esta línea, los especialistas incrementan desde hace años la realización de espirometrías, que permiten mostrar la obstrucción existente en las vías respiratoriaas. "Además de la clínica compatible –disnea, fatiga, falta de aire, tos crónica, expectoración matutina– necesitamos realizar esta prueba", apunta Gómez.
La edad media de los diagnosticados se sitúa en torno a los 50 o 60 años, pero los especialistas aseguran que también hay jóvenes afectados. "Hay gente que es más susceptible a padecer EPOC, incluso por genética, por lo que puedes encontrar casos en gente de 30 años", afirma Lamela. Aunque en un inicio eran más los hombres diagnosticados, cada vez son más mujeres las que padecen la enfermedad. "De igual forma que con el cáncer de pulmón: antes era raro en una mujer, ahora no", añade.
Una enfermedad todavía "poco conocida" entre la población
"Todavía se calcula que hay un 40% de la población que la desconoce, pero es la cuarta causa de muerte en nuestro país", explica el especialista Hugo Gómez. Este año, la pandemia impidió que GalEpoc llevase a cabo su habitual celebración del día mundial de la EPOC –en años anteriores, los profesionales realizaban espirometrías en el hall del CHUO para dar a conocer la técnica y la enfermedad–.
Pacientes de riesgo
Los enfermos de EPOC son pacientes de riesgo ante el contagio de covid, de igual forma que las personas con otro tipo de enfermedades crónicas, como la diabetes o la hipertensión.
"Tienen una capacidad respiratoria disminuida, por lo que es factible que si se contagian tengan que ir a cuidados intensivos por evolucionar de forma desfavorable, es un factor de riesgo", asegura Joaquín Lamela.
Joaquín Lamela: "Ningún fármaco puede evitar el curso inexorable de la enfermedad"
El doctor Lamela recuerda la falta de una cura para la enfermedad: "Ningún fármaco puede evitar el curso inexorable de la enfermedad". Por ello, dejar de fumar es la mejor herramienta: "Si una persona deja el tabaco pasa a tener una pérdida de función pulmonar como la de una persona no fumadora, es decir, mucho menor. Aún así, lo que has perdido de función pulmonar ya no lo recuperas". Los tratamientos de la EPOC son de tipo "sintomáticos", ya que permiten aliviar la dificultad respiratoria del paciente, aunque no impiden el agravamiento de la enfermedad con el paso del tiempo. "Tampoco aumentan la supervivencia de los enfermos", añade Lamela.
El neumólogo anima a la población a dejar el hábito tabáquico y recuerda la reciente existencia de diversos medicamentos para ayudar a hacerlo (tales como el champix o el zyntabac). "Aún así, está claro, tienes que estar dispuesto a pasarlo mal en el proceso, es la única forma de dejar una droga, la que sea. Los fármacos pueden ayudarte a que lo pases menos mal, pero luego tienes que mantener tú la fuerza de voluntad cuando pase el tiempo", explica el especialista.
Además, pone el foco en la importancia de conservar el peso adecuado y hacer ejercicio para combatir los efectos de la enfermedad en la salud: "El sobrepeso o la obesidad hacen que la persona con EPOC tenga mayor dificultad respiratoria al hacer esfuerzos".
Hugo Gómez: "El tabaquismo es una lacra que se banaliza en muchas ocasiones"
El neumólogo Hugo Gómez explica otra de las posibles causas de la enfermedad, al margen del tabaquismo. "En Galicia, en Asturias o en Sudamérica, hay un porcentaje de la EPOC que se debe a la combustión de biomasa en las lareiras, en las cocinas de leña... Antes estábamos tanto en las cocinas y ese humo también puede provocar la enfermedad, aunque es una EPOC más leve, menos inflamatoria", explica el especialista. Aún así, remarca la importancia de dejar de fumar: "El tabaquismo es una lacra que se banaliza en muchas ocasiones: lo vemos en la gente que tiene asma y aún así fuma".
Gómez explica que la evolución de la EPOC "no es instantánea", ya que se necesita un consumo continuado de tabaco y, por tanto, un daño continuado en el pulmón. "Es una patología que empieza a dar la cara con el paso del tiempo", apunta.
Respecto al tratamiento de los pacientes ya diagnosticados, Hugo Gómez destaca la importancia de la prevención para evitar complicaciones, así como la necesidad de hospitalizar: "Muchas veces es inevitable ingresar a nuestros pacientes para estabilizarlos, pero trabajamos mucho en evitar que suceda, es malo para ellos. Ya sea a través de Atención Primaria, con las consultas que tenemos específicas de EPOC o con los hospitales de día de neumología, a donde pueden llamar los propios pacientes ante cualquier deterioro de su salud...".
