Los colegios de la ciudad pasan esta semana entre castañas, canciones, juegos y hogueras, enseñando a los pequeños la historia de una de las fiestas tradicionales más arraigadas.
Llegó el otoño, y con él una de las fiestas populares más arraigadas en Ourense, el magosto. Es tiempo de castañas, chorizo y canciones que entonar alrededor de la hoguera, una cita a la que no falta nadie, ni siquiera los más pequeños de la ciudad, que llevan días preparando la fiesta en sus respectivos centros educativos.
Colegios como Divina Pastora, Carmelitas, Maristas, La Purísima o Santo Ángel cuentan con una semana repleta de actividades con las que los pequeños conocen el origen de esta tradición, las propiedades de las castañas, su importancia y el significado de la fiesta a través de un magosto con sus compañeros. Algunos, como los alumnos del Divina Pastora, se adelantaban y se acercaban ayer al monte sin dejar que la posibilidad de lluvia les amargase la jornada.
Los alumnos de entre 6 y 12 años prendieron ayer sus hogueras en Leiro y Monterrei, una actividad que hoy repetirán los más pequeños. Lucía Fontenla, profesora de Educación Primaria en el centro, explicaba que a los niños "les encanta" y aclaró que debido al mal tiempo dudaron, "no sabíamos qué hacer y ellos estaban a la espera por lo que decidimos ir a la aventura. Les hace mucha ilusión".
Otros adelantados son los del colegio La Purísima, cuyos alumnos de Educación Secundaria ya hicieron el lunes su fiesta en Oseira, donde aprovecharon para ver el monasterio. Las actividades del colegio incluyen a la mayoría de sus alumnos, de entre 3 y 16 años, algo que hace que esté toda la entrada "llena de castañas pintadas, frutos de otoño", según explica su directora, Sor María Luisa, que añade que "trabajan mucho la fiesta a nivel de clases".
Pero el día por excelencia para la celebración en los colegios no es otro que el jueves previo al festivo, fecha elegida por la mayoría de los centros para prender sus hogueras. Un ejemplo es el de Maristas, cuyos alumnos participan casi en la totalidad, desde los 3 hasta los 13 años. Los pequeños se divertirán en el centro con una hoguera de atrezzo y sartén para asar las castañas incluida. Mientras que los más mayores se desplazarán a distintos puntos de la provincia.
Otros centros introducen también a los personajes de la fiesta, como el Santo Ángel, cuyos alumnos de sexto se transforman en castañeros que reparten los frutos que asan entre los más pequeños.
Trabajo en clase
La fiesta se trabaja también en las diferentes asignaturas, que adaptan el programa a lo que es el magosto. "Es una semana divertida, y a la vez aprenden; en sociales y naturales se les explica el origen, los productos que se sacan de la castaña o lo que significa en la economía", explicó María Fernanda Rodríguez, directora pedagógica en el Santo Ángel.
Una semana intensa en la que tampoco olvidan a San Martiño, patrón de la ciudad y que celebra su carrera popular el domingo. Otro evento que todos los centros preparan. "Casi siempre somos el centro de mayor número de alumnado en la carrera, serán unos 300 o 400 niños, los de infantil con la familia y los mayores en grupo", explica Alberto Casado, coordinador de infantil en Carmelitas.
