Un grupo de alumnos del colegio Padre Feijóo Zorelle contactaron a través de Skype con la base española antártica "Gabriel de Castilla", ubicada en la isla de Decepción, donde investiga la biodiversidad del continente.
Alumnos del colegio Padre Feijóo Zorelle, localizado en la calle Doctor Fleming, tuvieron ayer la oportunidad de conocer de forma virtual cómo se vive en la Antártida. Para ello, contactaron a través de videoconferencia con la base española del Ejército de Tierra "Gabriel de Castilla", situada en la isla de Decepción, a unos 13.000 kilómetros de distancia de Ourense.
El fuerte viento que azotaba al archipiélago de las Shetland del Sur no fue impedimento para que los escolares pudieran ver cómo es el suelo que se pisa en uno de los lugares más remotos del mundo pero también uno de los destinos que más atrae a turistas todos los años. Todo ello gracias al sargento primero en telecomunicaciones, el ourensano Diego Núñez, que fue el encargado de explicar a los más jóvenes las características de la flora y fauna del también conocido como sexto continente. También aspectos relacionados con su climatología en la que se registran menos precipitaciones que en el desierto del Sáhara. "La Antártida es un desierto de hielo donde se alcanzan casi a diario los -87 grados centígrados y fuertes vientos", explicó. Tanto él como sus compañeros, que se encargan del área de sismología y biodiversidad, están ya acostumbrados a tener luz solar durante las 24 horas del día y a vivir sumergido en un volcán acuático y, por el momento, durmiente.
Los escolares, de Primaria, Secundaria y algunos de Bachillerato, también pudieron resolver sus inquietudes respecto a cómo es la vida diaria en el continente durante la ronda de preguntas, que fueron de lo más variopintas: desde qué procesos siguen los residuos orgánicos que generan hasta si disponen de un facultativo que los atienda en caso de una dolencia. "Tenemos un médico pero aquí una apendicitis puede llevarte al otro mundo. También son muy frecuentes los accidentes de buceo", explicó el comandante Pedro Solís. De hecho, la población más cercana está a 1.000 kilómetros de distancia y el transporte en helicóptero desde la base militar puede ser complicado debido a las ráfagas de viento características de esta zona. Ahora bien, si los más mayores se interesaban por esas cuestiones, la atención de los pequeños la acaparaban los pingüinos. Exactamente el pingüino emperador, una especie amenazada por la foca leopardo que también presenta un riesgo para los buceadores por su agresividad.
La sesión divulgativa en la que participaron ayer los menores del centro educativo se enmarca dentro de la XXIX Campaña Antártica, cuyo objetivo es dar a conocer la presencia de España en el continente a través de actividades.
