La expectación por 12 disparos grabada en fotos

Ourense. 16-05-2016. Disparos el Chuo. Paz
photo_camera Un hombre observa las huellas de los disparos en la puerta después de que otro las fotografiase con su móvil.

Los pacientes y visitantes que acudieron al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense se quedaron sorprendidos al observar las huellas de los disparos, con los que posaron para 
hacerse fotografías

Es normal que a media mañana de un lunes la entrada al hospital sea un desfiladero continuo de pacientes y visitantes. Pero del de ayer no fue un lunes normal, ni de lejos. Las huellas de los 12 disparos en la fachada, canalones de agua, cristal de la entrada y en la ventanilla de la recepción de las instalaciones acapararon todos los focos de atención. Y también los flashes. Y es que la estampa por excelencia de ayer fue la de los ciudadanos fotografiando los boquetes e incluso haciéndose selfies con este particular fondo, que invadieron al momento las redes sociales.

"Está claro que una ya no puede venir tranquila ni a una revisión médica. Si esto llega a ser 12 horas más tarde, pudieron haber acabado con la vida de muchas personas", explicó Susana Trujillo antes de entrar al interior y sorprenderse con el gran número de disparos". Belén Fernández, que salía de una consulta, no fue capaz de expresar lo que sentía. "Te pone los pelos de punta el hecho de saber que la noche anterior se produjo un altercado de estas dimensiones".

Entre trípodes, cámaras, micrófonos y periodistas, los que todavía no se habían enterado de la noticia no daban crédito a lo sucedido. "Sabía que hubo una pelea entre dos grupos de etnia gitana, pero no pensé que pudiesen haber llegado a enfrentarse con armas", apuntó sorprendido Agustín Conde.

Alrededor de las doce y media del mediodía los presentes bajaron el volumen de sus conversaciones y exclamaciones. Dos agentes de la policía judicial se bajaron de un coche equipados con material de precisión, que utilizaron para analizar y medir las distancias entre los balazos. "¿Pero cómo?, ¿también hay disparos dentro?", preguntó un hombre a otro, sorprendido con la actuación policial. El segundo alabó la actuación de los guardias de seguridad "porque impidieron que hubiese muertos", pero el primero no se mostró conforme. "Eso fue suerte. Dos guardias no hubiesen hecho frente a diez hombres armados si en vez de huir se quedasen allí". Fue éste mismo quien lanzó la siguiente pregunta al aire: "¿Dónde está el arco de seguridad para entrar al hospital? Aquí no entra armado el que no quiere".

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