Amaia Aierbe y Marta Moreno son dos psicólogas del departamento de I+D de Nesplora, una empresa vasca que se ha desplazado hasta Galicia para trabajar con los mayores de Ategal en un proyecto sobre realidad virtual. Este es su relato de la experiencia
Nosotras llegamos desde San Sebastián a Santiago de Compostela con una maleta llena
de ordenadores y gafas de realidad virtual, preparas para una semana recorriendo Galicia y previendo días de duro trabajo, sin saber el tesoro que nos esperaba por tierras gallegas.
Nuestro objetivo principal era baremar una prueba llamada Nesplora AQUARIUM basada en realidad virtual que evalúa los procesos atencionales y la memoria de trabajo en adultos, es decir, buscábamos obtener las medias para cada rango de edad y sexo para quedespués, los profesionales sanitarios puedan interpretar los resultados de sus pacientes.
Necesitábamos seguir desarrollando una de las herramientas en las que estamos trabajando en estos momentos en Nesplora.
EN GALICIA, COMO EN CASA
No obstante, dentro de nuestros planes también contábamos con degustar la gastronomía del lugar: el pulpo, la empanada, los pimientos del Padrón, la tarta de Santiago...no queríamos dejar nada sin probar. Y, así lo hicimos, pero fue una grata sorpresa encontrarnos con que la gente con la que pudimos tratar era incluso mejor que cualquiera de las comidas.
Desde el primer momento nos sentimos acogidas por parte de todo el personal que trabaja en ATEGAL, nos hicieron sentir como en casa en todo momento y facilitaron nuestro trabajo siempre que podían, entre otras cosas, llevándonos todos los días de una parte de Galicia a otra, pendientes de nosotras, atentas para que todo marchase bien. Se agradece estar fuera de casa trabajando y recibir esa ayuda y calor por parte de la gente.
DESMONTANDO PREJUICIOS
En cuanto a nuestra labor, esta vez debíamos trabajar con personas mayores. Ya teníamos algo de experiencia en este ámbito, pero no la suficiente como para no tener algún que otro prejuicio hacia este colectivo, ya que muchas veces vemos las cosas desde una perspectiva errónea, desde el desconocimiento, lo cual nos lleva a dar por hecho cosas que no tienen por qué ser así.
No sabíamos cómo se iban a desenvolver las personas mayores con unas gafas de realidad virtual. Algo totalmente nuevo y desconocido para la mayoría de ellos. Y aquí se desmontó nuestro primer prejuicio, nos llevamos la grata sorpresa al ver que eran capaces de lidiar con la realidad virtual, y no solo con la realidad virtual, sino que, nos dieron una gran lección al mostrarnos todas las actividades a las que acudían tales como talleres de pintura, clases de informática, yoga, clases de idiomas... Un envejecimiento activo y envidiable gracias a la labor de ATEGAL.
EL PLACER DE TRABAJAR
Fueron unos días de duro trabajo por Galicia, acompañados de una ola de calor que tampoco ayudaba mucho, pero todo esto mereció la pena.
Mereció la pena viajar hasta allí, conocer la gente que nos esperaba en los diferentes centros de ATEGAL, poder escuchar sus historias, anécdotas e ilusiones.
Y cómo no, un placer haber conocido a las trabajadoras de la asociación, unas personas muy profesionales, con ganas de mejorar día a día, buscando siempre lo mejor para los usuarios de las aulas, cercanas, cariñosas y siempre pendientes de nosotras para hacernos la estancia por sus tierras lo más agradable posible.
Y en especial, queremos agradecer a Paula por su ayuda, por su tiempo, por sus ganas de colaborar, por cuidarnos como reinas y por todo lo que hizo por nosotras durante esos días.
Esperamos volver pronto y poder seguir en colaboración con ATEGAL en un proyecto enriquecedor.
