Al ser inferiores a dos años de prisión quedan suspendidas, por lo que el proceso penal les sale gratis
Una media de entre 20 y 25 conductores extranjeros, en su mayoría portugueses, es enjuiciada cada año en la provincia por delitos contra la seguridad vial tras ser interceptados por la Guardia Civil y dar positivo en alcohol (más de 60 miligramos por litro de aire espirado), por conducir de forma temeraria o sin carné, entre otras infracciones penales.
Todos ellos suelen acudir a las vistas orales fijadas en los distintos juzgados ourensanos, mayoritariamente en los de Verín, Xinzo y Ourense, pero el 90%, según fuentes judiciales, intenta eludir el cumplimiento de la condena, hasta el punto que ya no se les da la posibilidad de que puedan acogerse a realizar trabajos comunitarios, derecho del que disponen los conductores residentes en Ourense y resto del territorio nacional. "No suelen ser condenados a trabajos comunitarios porque hay el riesgo de que, al residir en otro país, no los realicen", apuntó el abogado Miguel Ángel Rodríguez.
Las penas suelen ser meses- multa, una cuantía económica que va en función de delito y la retirada del carne de conducir. En ambos casos, los penados están conformes, pero eluden el pago, pidiendo que se le compute por el ingreso en la cárcel, que al ser menor de dos años no llegan a ingresar. De esta forma tampoco pagan la sanción impuesta en la sentencia.
La retirada del carné de conducir ya no la mencionan, dado que esta medida no afecta al regresar a su país, ni tan siquiera se le restan los puntos ante la falta de un convenio entre países europeos. "Hay conductores lusos que tienen un amplio historial de infracciones en las carreteras ourensanas y, sin embargo, en su país están limpios. Su historial de conductor está impecable", aseguraron fuentes de Tráfico.
Controles
La Guardia Civil es consciente de la situación y establece controles, sobre todo en época de vacaciones, para interceptar conductores extranjeros que circulan a excesiva velocidad o tras consumir alcohol.
En caso de ser detenidos o prestar declaración en calidad de investigados, la patrulla le intervine el vehículo y no se lo devuelven hasta que comparezca en un juicio rápido en el juzgado. De esta forma, se aseguran que va acudir a la vista. En caso contrario, pueden aprovechar para plantar la vista, máxime cuando se trata de un conductor que tiene domicilios en dos país diferentes. "Hay portugueses que circulan por la provincia que son naturales de Portugal y están emigrados en Francia, donde tienen otra residencia", apuntaron en Tráfico, puntualizando que en España les cuenta la infracción o condena impuesta, pero en sus países no.
A los que cometen una infracción administrativa, también les intervienen el coche, pero se lo devuelven nada más pagar la multa, que debe ser en efectivo. "Si viajan con familia y no llevan dinero encima se les deja continuar el viaje, pero deben dejar algo de valor que garantice de que van a regresar y pagar", añadieron fuente de Tráfico. La situación también se produce a la inversa. Los conductores españoles, en caso de ser multados en Portugal, deben abonar la sanción en efectivo, dado que de no ser así también se le inmoviliza el vehículo. En caso de delito, la Justicia, ante la falta de un convenio sobre seguridad vial, tampoco les puede embargar bienes en España, por lo que, ante una condena de multa, suelen computarla por penas de cárcel, que no son tenidas su historial en España.
En el último año, en los juzgados de Chaves no fue enjuiciado ningún conductor ourensano por delitos contra la seguridad vial.
Más de diez días con el coche intervenido esperando juicio
Asegurar la presencia en el juicio es un objetivo prioritario para la Guardia Civil de Tráfico por lo que hay extranjeros que se han visto "atrapados" en territorio español aguardando por la vista y el automóvil. Hay casos como el de un luso que tuvo que permanecer más de 10 días en Verín esperando a que le dieran su coche. El conductor fue interceptado con más alcohol del permitido y le fue intervenido el vehículo ante el riesgo de que no compareciera en el juicio rápido, que tardó en celebrarse ante la ausencia del titular del juzgado. El abogado Miguel Ángel Rodríguez no es la primera vez que se encarga de la defensa de conductores extranjeros en los juzgados ourensanos. "La intervención del coche me parece una medida exagerada", apuntó el letrado, puntualizando que muchos de los conductores que son penados suelen eludir las condenas, "pero también los hay que suelen pagar y cumplir a rajatabla la pena impuesta", aseguró.
Los que intentan eludir el cumplimiento de las condenas suelen refugiarse en sus países de origen y evitan circular por las carreteras de la provincia ante el riesgo de que sean sorprendidos por Tráfico. Según fuentes judiciales, suelen esperar dos años, el tiempo para que el delito esté ya prescrito.
La mayoría de los conductores enjuiciados en los últimos dos años en la provincia son oriundos del norte de Portugal.
El Ministerio Público es consciente de la situación y trabaja en colaboración con la Guardia Civil de Tráfico. Según los datos que maneja la Fiscalía,son pocas las sentencias por delitos de tráfico que quedan sin cumplir.
