TEMPORAL

"Félix" se aleja tras anegar paseos y llenar los embalses

El Concello de Ourense cerró el área fluvial en las termas y el Arnoia inundó el balneario de Molgas

La borrasca "Félix" se despidió de la provincia de Ourense tras dejar varios paseos fluviales cerrados y los embalses al límite o incluso rebosados. Fue el caso del de As Chas, en Oímbra, donde el agua acumulada fue tanta que superó la estructura de hormigón. En el embalse de Velle en Ourense se alcanzaban los 798 metros cúbicos de agua desembalsada por segundo. El embalse de Chandrexa tuvo igualmente que desembalsar al máximo de su capacidad debido al volumen de agua acumulado.

En la cuenca del Duero, el río Támega que registraba en la noche del sábado, a su paso por la localidad de Rabal, un caudal superior al nivel de alarma, ayer salía ya de esa situación, con un volumen de agua inferior al de alerta.

Permaneció, sin embargo, totalmente anegada el área recreativa de la localidad de Vilaza, en el municipio de Monterrei, donde el río Bubal, desbordado, había tomado incluso la carretera durante la jornada del sábado. También en el Concello de Ourense se tomó la decisión de cerrar el paseo fluvial a la altura de las termas de A Chavasqueira, debido al creciente caudal del río Miño por el agua desembalsada desde la presa de Velle. En el río Barbaña, el aliviadero de un colector -situado a la altura de Avilés de Taramancos- vertió al cauce, al superarse la capacidad de la red.

Por otra parte, los ribadavienses permanecieron con un ojo puesto en el caudal del Avia a su paso por A Quinza, donde las aguas llegaron a cubrir los ojos del puente. En Baños de Molgas, el río Arnoia bajó ayer más crecido que en la jornada del sábado y llegó a inundar el bajo del balneario de la localidad.

Viento

Los vientos fueron también protagonistas durante la jornada de ayer, sorprendiendo a más de un paseante en la ciudad a media mañana y alcanzando los 80 kilómetros por hora, de media, en la provincia, aunque las rachas superaron los 100 kilómetros por hora por encima de los 900 metros.

Carballeda de Valdeorras registraba la racha máxima de Ourense y de Galicia con 155,7 kilómetros por hora. El sábado también había sido la localidad valdeorresa la que había registrado los vientos más fuertes de la jornada con 138,5 kilómetros por hora.

Junto a este concello, Cabeza de Manzaneda ocupó el tercer puesto en el ránking de los municipios que tuvieron las rachas de viento más fuertes durante la jornada de ayer, con 112,9 kilómetros por hora.

Precisamente por este motivo, y a pesar de tener nieve acumulada, la estación de montaña decidió no abrir al público sus pistas y remontes este fin de semana, por razones de seguridad.

Queda la lluvia y llega la nieve hasta el miércoles, que se acerca otra borrasca

Tras el paso de la borrasca "Félix", que desde la tarde de ayer se fue alejando de la comunidad gallega hacia el Golfo de Vizcaya, quedan en la provincia "los restos en forma de lluvias y llegará la nieve a cotas en torno a los 1.000 metros, tanto durante la jornada del lunes como la del martes", señala Juan Taboada, meteorólogo de Meteogalicia. En todo caso, desaparece la persistencia de las lluvias que se registraron durante las jornadas del sábado y el domingo, y los vientos, del Sudoeste, reducirán de forma importante su intensidad.

"El miércoles está previsto que llegue una nueva borrasca y se activarán nuevas alertas, todavía por determinar, ya que aún no se sabe si será tan intensa como lo ha sido Félix", señalan desde Meteogalicia.

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