La 13 edición del festival reducirá su duración a dos días y se celebrará en Benposta por cuarto año consecutivo
La 13 edición del Festival Reperkusión reducirá su duración a dos días y se celebrará en Benposta por cuarto año consecutivo pero en esta ocasión será la primera vez que tenga lugar sin la presencia de Manu Chao.
"Por primera vez", según han señalado los organizadores, se celebra sin Manu Chao y el propio Reperkusión será el cabeza de cartel del Festival de este año que llega ya a su 13 edición, presentada este jueves en el Consistorio de la capital ourensana.
Con un presupuesto en torno a los 100.000 euros, muy similar al de recientes ediciones anteriores, el Ayuntamiento de Ourense aportará 14.520 euros y 12.146 la Xunta de Galicia a través de Agadic. Además el Consistorio se ha hecho cargo de los trabajos de adecentar las instalaciones y aporta un centenar de autobuses que unirán permanentemente durante los dos días que dura el festival, la capital ourensana con Benposta.
Por cuarto año consecutivo los terrenos de Benposta del desaparecido Circo de Los Muchachos volverán a servir como escenario del Reperkusión, que se celebrará estos viernes y sábado, 11 y 12 de septiembre. También este año se ha habilitado una gran zona de acampada de modo que es posible permanecer a pie de festival sin salir del recinto de Benposta.
También como en años anteriores la concesionaria del transporte municipal habilitará autobuses gratis que unirán permanentemente la capital con el recinto del festival. La organización repite esquema en cuanto a los espectáculos, gratuitos durante todo el día y de pago los de la noche cuando se producen los principales conciertos.
Para éstos, la entrada será a 15 euros en venta anticipada y 20 en taquilla, aunque es posible comprar bonos para las dos jornadas a 20 euros anticipadamente y 25 en taquilla. La acampada costará 25 euros en venta anticipada y 30 en taquilla.
"HACER EL CAZURRO"
Los organizadores presentaron además el componente sorpresa de este año, la cazurrada porque, según Emilio Oro y Xuxo Seara, "de eso se trata, de hacer el cazurro" y habrá que hacerlo de forma sonora, según han señalado, para lo que se ha presentado el cazú, un instrumento artesanal realizado por la organización y diseñado con la finalidad de, sobre todo, hacer cuanto más ruido.
Con esto y lo que a cada cual se le ocurra, se pretende improvisar la que puede ser la mayor charanga del mundo, según han señalado los organizadores.
El director de Agadic, Jacobo Sutil, ha felicitado a los organizadores y al Ayuntamiento de Ourense por haber convertido el festival en "un espectáculo multicultural", y ha abundado que la "música necesita el apoyo de todos para revitalizarse". "Festivales como éste son parte del motor económico pues sirven también para estimular el turismo y aglutinar a todo tipo de públicos", ha apostillado.
Los organizadores han subrayado que "son 48 horas seguidas de fiesta" y, aunque este año el festival se reduce a dos días, confían en mantener el número de asistentes de la pasada edición.
