Crisis del coronavirus

Fieles a su cita diaria

Ourense 27/4/20
Reportaje lectores de La Región
Victor Rodríguez,Carmen Pérez(Librería Ervedelo)
Fotos Martiño Pinal
photo_camera Victor Rodríguez y Carmen Pérez, en la Librería Ervedelo. //Fotos Martiño Pinal
Conocen sus rutinas, sus horarios y su ánimo. Los quiosqueros abren cada día esperando el momento de ver los rostros de su clientela fija, esa que compra la prensa cada día. También, o más aún, en estado de alarma.

Trabajadores esenciales, cada día, los quiosqueros madrugan para surtir de prensa a sus cliente. Sus rutinas son conocidas y, con esta crisis sanitaria, han cambiado, pero no su visita diaria para comprar el periódico. El momento sirve para compartir opiniones, pero también para cumplir con los recados del día y aprovechar para socializar un poco, cumpliendo con las normas del estado de alarma. 

Este es el caso del Quiosco Merlo, que desde primera hora se encarga de repartir información, pero también algo de pan. Uno de sus clientes más fieles es Antonio González, al que ayer se le pegaron las sábanas. "Hoxe - por ayer - despertei tarde", cuenta mientras compra La Región, como cada día. Mercedes López, la quiosquera de Merlo, se hace eco de este cambio en la rutina de González: "A verdade é que veu máis tarde que outras veces". 

Ourense 27/4/20
Reportaje lectores de La Región
Antonio González,Mª Mercedes López (Kiosko merlo)
Fotos Martiño Pinal

Antonio González y María Mercedes López, en Kiosko Merlo. 

Mientras los clientes vienen y van, comprando la prensa y llevándose pan fresco, González explica su plan de la mañana: "Fun a Praza por pementos para poñer e aproveitei para vir polo xornal e xa marcho para casa". Este vecino de A Carballeira baja por las mañanas a la avenida de Portugal para hacerse con un nuevo número de La Región con un claro objetivo: "Así estamos informados e entretémonos". López conoce ya los horarios de sus clientes, que suelen ser madrugadores. Los que no, dejan La región guardada a buen recaudo: "Teño moitas reservadas", cuenta. Mientras los clientes entran y salen, muestra algunos de los cambios en los más fieles: "Un deles agora venme máis tarde, porque antes levaba aos netos ao colexio". Además, este momento genera un poco de charla con otros lectores sobre actualidad. "Montan pequenas tertulias, nas que opinan sobre o que está pasando", comenta López. Eso sí, tiene claro que no le da tiempo a aburrirse: "Estou bastante entretida todos os días".

"Ao saír do traballo veño comprar o xornal e logo, directiña para a casa ", cuenta Carmen Pérez, clienta de Ervedelo

La Librería Ervedelo tampoco falla a los lectores de la prensa diaria, que acuden en busca de información. "Saio de traballar do pavillón, veño aquí por La Región e logo, directiña para a casa, que é o que hai que facer", explica Carmen Pérez, una lectora y clienta fija de esta librería que vende prensa en O Couto. Las costumbres de la clientela cambiaron porque ya "no tienen el bar para leer el periódico". Ahora mantienen los clientes habituales, a los que se le suman otros nuevos.

Las paradas de Pérez son muy breves. "Non se pode entreter un", pero siempre hay tiempo para bromear sobre el día a día: "Hai que estar informados do que pasa, pero tamén temos que entreternos un pouco", afirma esta lectora de La Región. Coge el diario, paga y regresa  su casa. "É o que mandan", en esta situación que "nunca se viu antes". 

Ourense 27/4/20
Reportaje lectores de La Región
Ana Alonso,Mª jesús Cabo (Kiosko Anita)
Fotos Martiño Pinal

María Jesús Cabo sostiene el periódico frente al Kiosko Anita. Dentro, Ana Alonso. 

"En la televisión no se dice lo que pasa en ourense"

Anita Alonso se alegra de ver cada día a sus clientes, fieles lectores de prensa. "Gústanos poder velos nesta situación na que vivimos", cuenta esta mujer que regenta el KioscoAnita en la avenida de Buenos Aires. Ahí llega, como cada día, María José Cabo. En un descanso de su trabajo, que hace desde casa, decide bajar a comprar La Región: "Es bueno estar informado, especialmente de lo que pasa aquí en Ourense que en la televisión no se dice", explica.

Detrás de una protección extrema contra el coronavirus, Alonso le hace entrega de su ejemplar para que pueda volver a su tarea. "Trabajo fuera, pero siempre me informo de lo que aquí pasa. Desde que esto comenzó, me vine a casa a teletrabajar y compro el periódico siempre", cuenta María José Cabo. La prensa, los quioscos y sus fieles clientes, no fallan a la cita cada día. 

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