El estudiante carballinés de Ingeniería Industrial Diego Álvarez González ha logrado sumar ya cerca de 23.000 apoyos desde todo el mundo a su petición online para que se regule la situación de los 200.000 ingenieros españoles titulados antes de la entrada en vigor del actual Plan Bolonia.
La iniciativa que defiende el ourensano se justifica debido a que el reconocimiento de estos ingenieros todavía no ha sido equiparado por parte del Ministerio de Educación al llamado 'nivel 7', que establece el Marco Europeo de Cualificaciones (EQF) y que equivaldría a los títulos de grado más máster.
La mayoría de los países europeos ya se ha acogido a esta nueva regulación, que según defiende Diego Álvarez, 'no supondría ningún gasto adicional para Educación, más allá de publicar una orden ministerial'. Esta desventaja en la que se encuentran los ingenieros titulados españoles supone, por un lado, que aquellos que traten de buscar empleo fuera del país se encuentran tan sólo con el título de graduados, sin el máster, lo que rebaja su cualificación profesional; y por otro lado, que las empresas nacionales no pueden equiparar el nivel de sus ingenieros al de otras compañías extranjeras, lo que hace que sean peor valoradas en las licitaciones de concursos públicos fuera de nuestro país.
Esta iniciativa ya ha contado con el apoyo de colectivos profesionales como la Federación de Asociaciones de Ingenieros Industriales, el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, o el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros de Minas.
Precisamente, ayer mismo la portavoz de Educación del BNG en el Congreso de los Diputados, Rosana Pérez, registró una iniciativa para que la Cámara Baja inste al Gobierno a equiparar estos títulos universitarios.
La mayoría de los países europeos ya se ha acogido a esta nueva regulación, que según defiende Diego Álvarez, 'no supondría ningún gasto adicional para Educación, más allá de publicar una orden ministerial'. Esta desventaja en la que se encuentran los ingenieros titulados españoles supone, por un lado, que aquellos que traten de buscar empleo fuera del país se encuentran tan sólo con el título de graduados, sin el máster, lo que rebaja su cualificación profesional; y por otro lado, que las empresas nacionales no pueden equiparar el nivel de sus ingenieros al de otras compañías extranjeras, lo que hace que sean peor valoradas en las licitaciones de concursos públicos fuera de nuestro país.
Esta iniciativa ya ha contado con el apoyo de colectivos profesionales como la Federación de Asociaciones de Ingenieros Industriales, el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, o el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros de Minas.
Precisamente, ayer mismo la portavoz de Educación del BNG en el Congreso de los Diputados, Rosana Pérez, registró una iniciativa para que la Cámara Baja inste al Gobierno a equiparar estos títulos universitarios.
