Los obstáculos para investigar ataques al medio ambiente -como los incendios forestales, los vertidos a los ríos o los actos vandálicos contra el patrimonio histórico- provocan que la Justicia se vea abocada, con demasiada regularidad, a archivar multitud de diligencias de investigación (informativas) encaminadas a transformarlas en posteriores denuncias y así depurar responsabilidades por los atentados contra el entorno natural.
De hecho, la Fiscalía dio carpetazo al el 87% de los expedientes de este tipo abiertos el pasado año. Bien, por la falta de pruebas o por no poder determinarse de forma fehaciente la autoría de los delitos, que quedaron inevitablemente impunes.
A lo largo de 2010 la Fiscalía de Ourense inició un total de 31 diligencias por delitos relacionados con el medio ambiente, llegando a archivarse 27. Del total de expedientes abiertos, tan sólo tres se encuentran a día de hoy en fase de trámite (dos por delitos contra el patrimonio histórico y uno por malos tratos a animales domésticos). En cuanto a la tipología de delitos que requirieron la apertura de estos casos, 14 diligencias se iniciaron por incendios forestales, dos por delitos contra la ordenación del territorio y urbanismo, también dos por atentados contra el patrimonio histórico y una por malos tratos a animales. Los juzgados de la provincia arrastran, por otro lado, un total de siete diligencias de investigación del año 2009, que tampoco fueron resuletas a día de hoy.
PROCEDIMIENTOS JUDICIALES
Más elevado fue el número de procedimientos judiciales que, a través de atestados de las fuerzas del orden estuvieron motivados por delitos relacionados con ataques medioambientales. Los juzgados acogieron 310 procesos por este tipo de actividad delictiva a lo largo de 2010. Cabe destacar que, de estos, un total de 297 tuvieron su origen en incendios forestales, siendo muchos menos los que se iniciaron por ataques al patrimonio histórico (3), a la flora y fauna (4) y por malos tratos a animales (3). A pesar del elevado número de procedimientos judiciales, no obstante, la cifra de sentencias dictadas en 2010 por este tipo de delitos ascendió a siete, de las que seis fueron condenatorias y una absolutoria. Por otra parte, la mayoría de los condenados, lo fueron, a tenor del elevado número de procesos judiciales por fuegos, precisamente, por delitos de incendios forestales (3), junto con dos por maltrato a animales y uno por un delito contra la ordenación del territorio.
A lo largo de 2010 la Fiscalía de Ourense inició un total de 31 diligencias por delitos relacionados con el medio ambiente, llegando a archivarse 27. Del total de expedientes abiertos, tan sólo tres se encuentran a día de hoy en fase de trámite (dos por delitos contra el patrimonio histórico y uno por malos tratos a animales domésticos). En cuanto a la tipología de delitos que requirieron la apertura de estos casos, 14 diligencias se iniciaron por incendios forestales, dos por delitos contra la ordenación del territorio y urbanismo, también dos por atentados contra el patrimonio histórico y una por malos tratos a animales. Los juzgados de la provincia arrastran, por otro lado, un total de siete diligencias de investigación del año 2009, que tampoco fueron resuletas a día de hoy.
PROCEDIMIENTOS JUDICIALES
Más elevado fue el número de procedimientos judiciales que, a través de atestados de las fuerzas del orden estuvieron motivados por delitos relacionados con ataques medioambientales. Los juzgados acogieron 310 procesos por este tipo de actividad delictiva a lo largo de 2010. Cabe destacar que, de estos, un total de 297 tuvieron su origen en incendios forestales, siendo muchos menos los que se iniciaron por ataques al patrimonio histórico (3), a la flora y fauna (4) y por malos tratos a animales (3). A pesar del elevado número de procedimientos judiciales, no obstante, la cifra de sentencias dictadas en 2010 por este tipo de delitos ascendió a siete, de las que seis fueron condenatorias y una absolutoria. Por otra parte, la mayoría de los condenados, lo fueron, a tenor del elevado número de procesos judiciales por fuegos, precisamente, por delitos de incendios forestales (3), junto con dos por maltrato a animales y uno por un delito contra la ordenación del territorio.
