La Fundación San Rosendo, que suma 71 centros y cuenta ya con 1.891 trabajadores en plantilla (un 5% más que el año pasado y la cifra más alta de toda esta década), abordará nuevos proyectos en 2021, entre los que se incluye la construcción de una nueva residencia de mayores en Verín y su desembarco en la ciudad de A Coruña, con un centro residencial en pleno centro de esa urbe. Además, una de las grandes impulsoras del trabajo en el rural ourensano anunció ayer la puesta en marcha esta misma semana de la residencia de mayores de Lobios y el centro de Os Milagros.
La Fundación eleva su presupuesto de 2021 a 54 millones de euros, la cifra más alta hasta la fecha y cuyos gastos sufragan al 99% los usuarios. Cuenta con una partida de inversión de 2,8 millones de euros, con los que prevé acometer la ampliación de su residencia Santiago Apóstol de Vilamarín, dotándola de 26 nuevas plazas para mayores, y el desarrollo de una nueva vivienda comunitaria en Ourense ciudad, en el edificio de Alfredo Romero, así como un nuevo recurso en la avenida de Pontevedra.
Nuevas infraestructuras
En cuanto a las grandes inversiones en cartera, la Fundación San Rosendo prevé iniciar las obras del centro para mayores dependientes en Verín, que tendrá 120 plazas, y se ubicará en un terreno de más de 4.000 metros cuadrados cedido por el Concello verinés. Este centro prevé la contratación de 50 profesionales.
Otra de las grandes apuestas para este próximo año es el primer proyecto asistencial en la ciudad de A Coruña, en colaboración con el Arzobispado de Santiago de Compostela. Se trata de un centro de 45 plazas para mayores dependientes en el centro de la urbe herculina.
Los proyectos de la Fundación no se quedan ahí y siguen apostando por el rural con la ampliación del centro asistencial de Vilamarín en 26 plazas, hasta un total de 58. Contará con una inversión de 800.000 euros para construir y equipar la nueva área.
En el edificio de Alfredo Romero de la ciudad se Ourense, se ejecutarán obras para una vivienda comunitaria en el primer piso, un recurso que estará dotado con 10 plazas.
Por último, en el edificio contiguo a las oficinas de la Fundación San Rosendo en la avenida de Pontevedra se desarrollará un nuevo recurso asistencial complementario al resto de servicios que, como explicó el presidente de la Fundación San Rosendo, José Luis Gavela, busca "satisfacer las necesidades de las personas mayores en las diferentes etapas de la vejez y mantener sus vinculaciones con el mismo entorno de la ciudad".
Memoria de 2020
En cuanto al balance de 2020, el año más complicado por la irrupción del covid-19, la Fundación acaba el año con 71 centros asistenciales en Galicia (46 de ellos en la provincia de Ourense, el 90% en el rural), de los cuales 57 son centros para mayores, sumando ya 3.710 plazas (22,7% son concertadas) que cubren 1.891 trabajadores.
Gavela avanzó ayer en la presentación de la memoria anual que ya se han abierto dos nuevos centros asistenciales en la provincia este 2020.
Ya desde verano,y tras haber cedido las instalaciones a la Xunta temporalmente para hacer una residencia integrada, se abrió el centro de atención especializada a personas con discapacidad Nuestra Señora de los Milagros, en Baños de Molgas. Ubicado en el antiguo colegio, fue rehabilitado por valor de 3,6 millones y tiene 90 plazas y 40 empleados. "La ocupación está ahora al 15%", señaló Gavela.
A esto se une la apertura de la nueva residencia de mayores de Lobios, abierta el pasado miércoles, y que ya acoge a los primeros seis usuarios y tiene más incorporaciones previstas. Tiene 80 plazas y creará 30 empleos cuando esté a pleno rendimiento. Aunque, de momento, y en aras de un nuevo modelo para tener unidades de convivencia más reducidas, esta residencia "no superará el 25% de ocupación".
