La comunidad gallega inauguró ayer la fase 3 de la desescalada con datos de hospitalización similares a los de las primeras semanas. Según los últimos datos de la Consellería de Sanidade hay un total de 20 personas ingresadas en los hospitales gallegos, de los que una persona permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en Santiago. El área sanitaria más afectada es, actualmente, la de Vigo, con 193 casos activos, seguido de Santiago, con 103 casos.
La provincia ourensana continúa en la buena senda, con 43 contagiados en activo, de los que solo dos se encuentran en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). La menor, una niña de 22 meses, ingresada por una infección y que volvió a dar positivo en la PCR del covid tras haber superado la enfermedad en mayo evoluciona favorablemente, según ha podido saber este periódico.
El resto de afectados se mantiene en seguimiento domiciliario, con monitorización diaria para conocer la evolución de la enfermedad. Por ahora, el ritmo de contagios no muestra aumentos significativos (desde el pasado sábado no se registran nuevos casos), lo que muestra la responsabilidad y cautela de la población ourensana. Las autoridades sanitarias recuerdan la importancia de continuar con las medidas de prevención durante la fase 3, para evitar rebrotes en la ciudadanía.
Estudio
Durante la jornada de ayer, el Sergas arrancó los test de la segunda oleada del estudio de seroprevalencia para conocer la circulación del coronavirus en Galicia. En la primera fase, el área de Ourense fue la que sumó mayor circulación del covid-19 de la comunidad, con el 1,88% de la población afectada por la infección.
El estudio muestra una baja inmunidad de grupo, avalada también por el análisis realizado por el Ministerio de Sanidad en las últimas semanas. Según la segunda oleada de la investigación, la provincia se sitúa en torno al 2,2% de afectación –lo que supone que en torno a 7.000 ourensanos pasaron la enfermedad–.
