Tenía tres caballos junto con las ovejas que fallecieron de hambre, pero los vendió al abandonar la granja
El ganadero Agustín M.B., de 28 años, que dejó morir de hambre su rebaño de ovejas y cabras en una granja abandonada de San Lorenzo de Piñor (Barbadás), las alimentó durante semanas a base de ramas, que cortaba en los árboles que crecen en la zona. Los animales llegaron a comer la corteza,dejando los troncos completamente limpios a lo largo de la explotación.
El joven no disponía, según fuentes de la Guardia Civil, de forraje ni de otro tipo de alimento (hierba y piensos) para las reses durante los meses de invierno.
A finales del año pasado, según la información que maneja el Concello de Barbadás, tenía el rebaño en el monte, donde pastoreaba, pero los sucesivos días de lluvia durante el 2018, según fuentes municipales, lo obligaron a trasladar el ganado a una granja abandonada (en la que fueron hallados muertos), que habilitó como establo sin ningún tipo de autorización. "Los vecinos no se enteraron porque justo al lado hay más ovejas y pensaron que eran del mismo dueño", afirmaron fuentes municipales.
El ganadero también tenía tres caballos pero, al parecer, los vendió antes de abandonar la explotación y dejar morir a los animales.
La Guardia Civil, que tomó declaración el pasado día 13 al ganadero como investigado por abandono animal, busca dentro de las pesquisas que está llevando a cabo a los equinos para comprobar su estado sanitario y físico.
Mientras, en la Consellería de Medio Rural aseguraban ayer que van a pedir al ganadero la devolución de los 22.000 euros que le fueron concedidos en concepto de subvención por su incorporación a la actividad ganadera. Aseguran que hace meses que le incoaron un expediente sancionador por el abandono en que tenía a los animales.
En el departamento que dirige Ángeles Vázquez están sopesando la idea de instalar cámaras de vigilancia en todas aquellas explotaciones ganaderas que comienzan a funcionar con dinero público, subvenciones, para evitar situaciones como la registrada durante estos días en la granja de San Lorenzo de Barbadás.
