La ejecutiva provincial emplaza al gobierno local a explicarse mientras busca cómo cerrar la crisis

La gobernabilidad del Concello ‘está asegurada', dice el PSdeG

Los miembros de la comisión permanente, al inicio de la reunión de ayer. En el centro, el secretario provincial, Raúl Fernández. (Foto: Martiño Pinal)
La ejecutiva provincial socialista asegura que 'está garantizada' la gobernabilidad en el Concello de Ourense porque el gobierno socialista no se romperá, al menos por el lado de los 'pachistas' (los cuatro ediles más afines a Pachi Vázquez), que en los últimos días han agrandado sus diferencias con el grupo 'paquista', el del alcalde y ediles afines en su momento al exregidor Francisco Rodríguez.
Y ello tiene su importancia porque hoy se celebra pleno municipal, nuevamente con el gobierno local en minoría, y habrá debate sobre el uso que hizo el PSOE municipal de la asignación económica para el mantenimiento y funcionamiento del grupo, la que incluyó gastos en bebidas alcohólicas, comidas en varios puntos del país y hasta un préstamo a un funcionario municipal, y que es la razón del último desencuentro interno. El PP preguntará por el uso de esos fondos, 70.200 euros el año pasado, y además se presentará una moción de urgencia al respecto.
La garantía de gobernabilidad la expresó ayer por la noche la comisión permanente de la ejecutiva provincial, el núcleo duro de la directiva que lidera Raúl Fernández y que ya anunció una reunión extraordinaria para la próxima semana -un día o dos después de la asamblea local del lunes- con objeto de analizar y buscar solución a la crisis abierta por la filtración de las múltiples facturas con cargo a ese fondo municipal que la ejecutiva 'conoció por los medios de comunicación', según recalcaron ayer sus miembros. Esa permanente, que ya evaluó ayer la crisis abierta en el grupo municipal del PSOE, cuenta con que el actual alcalde, Agustín Fernández, y la secretaria municipal del grupo, Aurea Soto, den las explicaciones pertinentes.
La crisis socialista y el gasto realizado fueron valorados por políticos del partido y de otras formaciones. El presidente de la Xunta, Núñez Feijóo, pidió un gobierno estable que mande un mensaje de 'normalidade institucional' y la diputada socialista en Madrid, Laura Seara, aseguró que el conflicto se resolverá dentro del PSOE y, después, será el partido el que dé cuentas del cierre de la crisis y si, de ella, se derivan responsabilidades.

Desagrado
Asimismo, el concejal de Hacienda en la ciudad, José Angel Vázquez Barquero, reconocía ayer que le desagrada la situación pro la que atraviesa el grupo pero defendió la 'legalidad' de los pagos realizados en alcohol y comidas durante el año pasado.
Tanto el PSOE como el PP, con idéntico número de concejales, recibieron el año pasado 70.200 euros para gastos de funcionamiento, que los populares dijeron haber gastado fundamentalmente en publicidad y propaganda del grupo (23.500 euros), gastos de representación (10.690 euros, entre actos políticos comidas del grupo, con los candidatos, medios de comunicación y un magosto popular, entre otros) y facturas de telecomunicaciones (18.323 euros, de pagos por los móviles de los ediles y un servicio de sms para comunicarse con los afiliados), entre otras facturas; hasta el punto de que gastaron algo más de lo que recibieron, puesto que entregaron al interventor, para su fiscalización, gastos por 70.760,56 euros.
No así el BNG, que recibió en 2012 23.400 euros y consumió 19.500 -le queda, pues, hucha-, el 80% en el alquiler de la sede nacionalista de la Rúa Concordia.

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