El nuncio apostólico en España, Renzo Fratini, abrió el congreso dedicado a la Vida Consagrada pidiendo "una nueva evangelización"
El nuncio apostólico del Vaticano en España, Renzo Fratini, abrió ayer el Congreso Regional de la Vida Consagrada. En su intervención a primera hora de la mañana y en la homilía posterior, trasladó a todos los participantes su satisfacción personal por encontrarse en Ourense mostrando con su presencia el merecido reconocimiento al servicio que realiza la vida religiosa a través de su consagración. De esta manera, Fratini dijo que "la vida consagrada es para la Iglesia esa luz en el camino, signo vivo del evangelio. Los consagrados, con el estilo de su vida y con la alegría de su entrega, son un estímulo para la esperanza". Asimismo, destacaba que allí donde hay religiosos hay alegría, pues "Dios es capaz de llenar nuestros corazones y hacernos felices". El prelado urgió así una nueva evangelización."La Iglesia tiene necesidad de santos", dijo, en instó a los asistentes a ejercer el servicio de "ser testimonio auténtico de vida transformada".
El nuncio apostólico quiso poner en valor la labor y el testimonio de la vida consagrada recordando las palabras de Juan Pablo II en referencia a que "muchos de nuestros contemporáneos no conocen todavía el amor de Dios o buscan llenar su corazón con sucedáneos insignificantes, por lo que es urgente ser testimonios del amor contemplado en Cristo".
Por su parte, el obispo Lemos Montanet, anfitrión del cencuentro, agradecía al nuncio haber querido participar en este evento, que "en Galicia, desde Ourense", quiere hacer presente el agradecimiento de la Iglesia a las congregaciones y órdenes religiosas, de manera especial en este año 2015 declarado por el papa Francisco como año de la vida consagrada.
Por la tarde, el secretario de la Congregación para los institutos de vida consagrada, el ourensano Rodríguez Carballo, intervino en la convención para hablar de los carismas en la Iglesia.
Los asistentes al congreso clausuran hoy el encuentro con una peregrinación al Santuario de Os Milagros.
