INCENDIOS EN OURENSE: Los incendiarios ponen el foco en el Xurés: “Queren que sexa negro"

Las lluvias hicieron acto de presencia para dar un respiro al Parque Natural Baixa Limia - Serra do Xurés. Desde el pasado viernes hasta este miércoles, los incendios originados en los municipios de Lobios, Lobeira y Muíños arrasaron con medio millar de hectáreas de este espacio reserva de las biosfera. Un año más, su paisaje es pasto de las llamas y en los seis municipios que lo componen -Lobios, Muíños, Entrimo, Bande, Lobeira y Calvos de Randín- sus vecinos reconocen su hartazgo ante esta “lacra” que azota sus montes. Cuatro días en los que siete incendios devoraron sus montes, el más dañino, el de Manín en Lobios. Su alcaldesa, María del Carmen Yáñez, lamenta este hecho ocurrido en su municipio. “Isto degrada o noso gran recurso do patrimonio natural que temos”, señala. El Parque do Xurés saltó a la noticia por el fallecimiento del piloto portugués en el accidente del hidroavión el sábado, del que su compañero herido ya fue trasladado desde Portugal a Salamanca, y no por sus paisajes: “É triste que sexamos coñecidos polos incendios e non porque sexamos un parque natural transfronteirizo”, afirma Yáñez. Lobeira también sufrió estos días, concretamente las parroquias de A Fraga y San Xes de Vilariño. “É unha lacra que todos os anos decimos a ver se acaba, pero parece ser que alguén quere que isto en vez de ser verde, sexa negro”, explica su alcalde, Antonio Iglesias. La reincidencia en los incendios, como en la parroquia de Requiáns (Muíños) en la que se repitieron hasta en tres ocasiones, mantiene alerta a estos territorios: “Esperemos que as labores de vixiancia den os seus frutos", desea Iglesias. "Desgraza", con esas palabras resume el regidor de Muíños, Plácido Álvarez, lo que cada año ocurre en el Xurés. "É unha xoia que serve para ver o contraste de que debería ser un parque natural que pasa do verde ao negro", expresa. Por todos estos estragos a su paisaje natural, piden concienciación entre la ciudadanía. "Facemos un chamamento a que a xente se conciencie, porque a maioría son intencionados e poñen en perigo ás persoas que traballan na súa extinción", comenta María del Carmen Yáñez. Gestión forestal Este problema viene de atrás "polos fallos estructurais", según el regidor de Entrimo, Ramón Alonso. La falta de gestión forestal, el abandono del rural y un sistema "de loita contra o lume inadecuado", son algunas de las razones. "Os lumes son reiterados e máis perigosos, non hai traballo preventivo e segue ardendo sen que se poña remedio", resalta Alonso. Desde Calvos de Randín, su alcalde, Aquilino Valencia califica la gestión como un "desastre" ante el estado que presenta el parque. "Algo que era verde está quedando negro onde só haberá pedras", afirma. Alonso mientras, lamenta que se queme este "motor económico dos nosos municipios". Las causas, unas veces de fuegos procedentes de Portugal y otras a manos de los incendiarios, ponen a trabajar cada año a estos territorios sin los resultados deseados, que el Xurés no arda. "Involucrámonos cada vez máis para protexer este recurso turístico e económico, que sofre unha lacra perxudicial", expresa Sandra Quintas, alcaldesa de Bande. Estrechar la cooperación con Portugal para impedir el avance transfronterizo, es uno de los nuevos objetivos: "Temos que esforzarnos os concellos limítrofes para unha maior coordinación de traballa neste parque", destaca Quintas. María del Carmen Yáñez aboga por priorizar "a colaboración, o diálogo e unha toma de decisións coordinada" que permita a este entorno natural evitar los "desastres ecolóxicos" que sufre cada año. Extinguido el incendio de Lobios tras calcinar más de 425 hectáreas Los cambios en la meteorología facilitaron la extinción del incendio que se originó en la parroquia de Manín (Lobios) el pasado sábado, según confirmó la Consellería de Medio Rural, que certificó una superficie provisional afectada de 425 hectáreas de monte raso. Su origen se remonta a un incendio de Portugal que cruzó la frontera y se saldó con la vida del piloto del hidroavión portugués estrellado mientras trabajaba con las brigadas antiincendios, del que se investigan las causas.