El incendio forestal declarado en la parroquia de Pentes, en el municipio ourensano de A Gudiña, ha calcinado unas 90 hectáreas, según las últimas estimaciones ofrecidas por la Consellería do Medio Rural con datos recogidos hasta las 13,30 horas de este domingo. Mientras, el único incendio que permanece activo en estos momentos en Galicia es el de Laza, resultante de la unión de los fuegos de este municipio y de Chandrexa de Queixa, que ha quemado ya unas 2.100 hectáreas.
Con todo, la Consellería do Medio Rural ha asegurado que este fuego se encuentra ya "prácticamente perimetrado" y además "evoluciona favorablemente hacia su estabilización".
En el punto han trabajado hasta el momento dos técnicos, 62 agentes, 124 brigadas, 63 motobombas, tres palas, un tractor, 12 aviones y 14 helicópteros.
Por otra parte, permanece estabilizado desde las 23,47 horas el incendio iniciado a última hora de la tarde de este sábado en la parroquia de Torbeo, en el ayuntamiento lucense de Ribas de Sil que, según las últimas mediciones provisionales, ha quemado unas 40 hectáreas.
Asimismo, en la provincia de Ourense permanecen controlados los incendios de Casaio, en Carballeda de Valdeorras, que ha quemado alrededor de 440 hectáreas; el de Astureses, en Boborás, con unas 120 hectáreas calcinadas; y, desde las 23,29 de este sábado, el de San Cosmede de Cusanca, en O Irixo, donde han ardido unas 680 hectáreas.
Además, la Xunta también ha dado por extinguido a las 02,09 horas un incendio activo en Vilardá, parroquia de San Xoán de Río (Ourense). Este fuego finalmente ha quemado unas 8,2 hectáreas: ocho de monte raso y 0,2 de arbolado.
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