Maba T, de 39 años, reconoció ayer en el Juzgado Penal 2 el delito de agresión sexual por el que fue denunciado en agosto del pasado año en el que la víctima era amiga pero también benefactora, ya que le ayudaba con donaciones de ropa y comida.
La fiscal optó por aplicarle una atenuante de alcoholismo ya que la defensa aportó informes médicos que acreditan que recibió asistencia por beber demasiado. Incluso entregó una copia de la sentencia del Penal 1, de 16 de junio, en la que la jueza le aprecia la atenuante muy cualificada de anomalía psíquica causada por el consumo abusivo de alcohol en un proceso en el que estaba acusado de un delito de daños en el H&M de la calle Paseo.
El inculpado fue condenado, sin necesidad de que se celebrara el juicio, a dos años de prisión, un mes de multa a razón de 3 euros al día y un alejamiento de la víctima a 300 metros, durante cinco años y medio, además de libertad vigilada por la agresión sexual, con aplicación de la agravante de género, y un delito leve de lesiones. En un principio se le pedían cinco años de cárcel.
Los hechos que lo llevaron a juicio ocurrieron el 27 de agosto de 2019 sobre las ocho y media de la tarde en la vivienda de la perjudicada. El acusado y su amiga, que es abogada de profesión, comenzaron a discutir porque ella le reprochó que le faltaba dinero. Maba T. tuvo una reacción violenta porque la arrojó sobre el sofá, la obligó a quitarse el vestido y la sometió a tocamientos, además de abofetear a la denunciante cuando le pedía que parase.
La mujer logró en un momento salir de la casa cuando le pidió un vaso de agua. La policía la encontró en el portal desnuda, una escena que fue presenciada por varios testigos que estaban en las inmediaciones. A consecuencia de los golpes y el forcejeo, la mujer sufrió numerosos hematomas en diferentes partes de su cuerpo.
El juicio estaba señalado para el 30 de marzo pero fue suspendido debido al estado de alarma.
