Inorde y CSIC aúnan fuerzas para recuperar el centeno ourensano

“O noso obxectivo é aumentar a rendibilidade das explotacións”, valora Rosendo Fernández, presidente del Inorde

El Consejo Superior de Investigaciones científicas (CSIC) y el Instituto Ourensano de Desarrollo Económico (Inorde) firmaron ayer un convenio de colaboración que busca, entre otros objetivos, favorecer la creación de proyectos de investigación para la recuperación de variedades autóctonas de centeno y avena negra. 

El Inorde colaborará con el grupo de investigación “Adaptabilidade e sustentabilidade de cultivos” que está integrado en la Misión Biológica de Galicia, iniciativa que cuenta ya con cien años de historia y pertenece al CSIC desde 1939. Se buscan métodos para lograr una mejora significativa de la adaptación de los cereales a las condiciones climáticas ourensanas, posibilitando así un cultivo más sostenible. Desde el Inorde se pretende que esta colaboración sea “moi beneficiosa para o sector agrario da nosa provincia”, teniendo en cuenta la capacidad técnica que posee la Misión Biológica de Galicia. 

“Esperamos que os froitos desta colaboración se expresen a través da recuperación e mellora de variedades endóxenas de cereais cos que o sector sexa capaz de aumentar a rendibilidade das súas explotacións a través dunha aposta decidida polo fomento da biodiversidade e a necesaria busca da sustentabilidade nun sector primario forte e vivo”, aseguró Rosendo Fernández, presidente del Inorde.

Los últimos datos del Anuario de Estatística Agraria de la Consellería do Medio Rural sitúan en Ourense una producción de 16.670 toneladas de centeno en el año 2019, por lo que es líder a nivel gallego, del mismo modo que lo es en producción de trigo o patata. Pontevedra limitó su contribución a 9 toneladas de centeno en el mismo periodo, dando muestra de la hegemonía ourensana en toda Galicia. 

Acuerdo transversal

Rosendo Fernández y la vicepresidenta de Organización y Relaciones Institucionales del CSIC, Rosina López-Alonso Fandiño, firmaron el convenio con el objetivo de realizar proyectos conjuntos en todas aquellas áreas que sean de interés común para estas entidades, más allá de la recuperación de variedades autóctonas de centeno y avena negra. 

Así, este protocolo de cooperación permitirá la organización de actividades comunes relacionadas con la promoción social de la investigación y el desarrollo tecnológico, además de desarrollar proyectos y programas de investigación en las áreas científicas de interés común, según surja esta necesidad.

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