Ciencia

Un investigador ourensano participa en un estudio pionero sobre párkinson

El investigador David Vega Avelaira. (Foto: Tomás Vega)
photo_camera El investigador David Vega Avelaira. (Foto: Tomás Vega)
David Vega es uno de los últimos 'fichajes' para el laboratorio de neurología de la Universidad Autónoma de Madrid

El investigador ourensano David Vega Avelaira estudiará la degeneración de células en el tálamo en enfermos de párkinson en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). Vega es uno de los últimos fichajes del centro público de la capital, al que llega con la doble función de dar clase en el grado de Medicina y de participar en las investigaciones neurológicas. 

El tálamo es una región del encéfalo que conecta la corteza cerebral y la médula espinal, y tiene una función crucial en la transmisión de información para mover el cuerpo, así como en la memoria o las emociones. "Contar qué poblaciones celulares se degeneran en el tálamo es un área que aún no está estudiada, y tiene mucha relación con el movimiento en los pacientes de párkinson", explica el ourensano.

Un cambio por necesidad

Esta es la primera vez que el doctor Vega aborda el párkinson. El ourensano llega a la investigación sobre esta enfermedad tras centrar su carrera en otro área de la neurociencia: el estudio del dolor. Entre sus publicaciones se incluye un capítulo en el "Oxford Textbook of Paediatric Pain", y su investigación se ha focalizado en el desarrollo de las vías de transmisión del dolor y las interacciones neuroinmunes que provocan dolor crónico. Llevó a cabo estudios alrededor de este tema entre Reino Unido y España, pero la crisis económica de 2010 frustró sus planes.

"Tuve que reinventarme y dar el paso a la universidad privada, a la docencia pura y dura, hasta que surgió esta oportunidad en la UAM", explica el profesor. Según apunta, este tipo de virajes bruscos no son raros en el sector de la investigación, un mundo -recalca- "muy competitivo" y que en España no cuenta con la financiación de, por ejemplo, Alemania o EEUU. "Con la pandemia del covid estamos viendo lo importante que es la investigación", apunta Vega, resignado a tomar lo que le ofrezcan.

"Eso no quita que el laboratorio en el que estoy sea un centro abierto, y que en el futuro tal vez pueda retomar mi investigación sobre el dolor, o encontrar sinergias entre esto y los estudios sobre párkinson", aventura el bioquímico. 

Por ahora, espera los frutos de su trabajo en la UAM y formula un deseo para el futuro inmediato: "Espero que tengamos suficiente financiación para llevar a cabo la investigación". 

Te puede interesar