La Policía Nacional ha citado como investigada a una mujer como presunta autora de un delito de hurto continuado en un domicilio. Una mujer denunció que alguien había robado más de 15.000 euros del interior de su casa. Según la denunciante, el dinero era propiedad de su hijo y estaba en la caja fuerte. Cuando fue a buscarlos para entregarle el dinero, se percató de que había desaparecido.
La víctima afirma que en el domicilio no había ningún signo de fuerza ni desorden, y que en la casa solo viven ella y su marido, pero que tiene acceso a la vivienda una empleada del hogar. La Policía, entonces, comenzó a investigar a la trabajadora, ya que -dicen- "es habitual que los denunciantes de este tipo de hechos hayan sido víctimas de pequeñas sustracciones cometidas a lo largo de los años, sustracciones que al ser de pequeñas cuantías no hubieran sido detectadas".
En estas ocasiones -continúan las fuentes policiales- los autores de los delitos aprovechan el acceso que tienen a los objetos de valor, prevaliéndose de la confianza que depositan en ellos los empleadores, "siendo en muchas ocasiones el quebranto de esta confianza el mayor disgusto".
Realizadas las investigaciones pertinentes, la Policía acreditó un delito de hurto continuado a esta mujer mediante la identificación de joyas cuyo valor asciende a 443,90 euros y demás efectos vendidos en su nombre y pertenecientes a la denunciante, así como el hurto de pequeñas cantidades que desaparecían del bolso.
