El día después de conocerse la aprobación del estudio de viabilidad para buscar un futuro al mercado de A Ponte, el pleno municipal volvió a tratar la situación del la Plaza de Abastos de As Burgas y lo que sucederá el día después de que finalice la actual remodelación del edificio, al ser una incógnita la distribución de los espacios y quién se hará cargo de esa actuación, la mejora de la accesibilidad al recinto o la reforma del entorno y el rianxo.
Soluciones a todos estos aspectos es lo que le reclamaron al alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome, el resto de concejales, incluido los siete del PP, que pese al regreso al gobierno exhibieron en varios momentos de la sesión plenaria sus diferencias con el regidor, tanto en el sentido de voto de varias mociones como en los debates sobre la Plaza de Abastos o el Centro de Iniciativas Empresariales, en el que Jácome no quiere que haya viveros de empresa.
El alcalde ourensano, en relación con el mercado de As Burgas, prometió que sí se renovará el entorno de la Plaza, pero volvió a cargar contra los placeros, augurando “que habrá una guerra porque no quieren volver al estar muy cómodos en la Alameda, así que a ver cómo lo encajamos”. El regidor dijo esto después de que la oposición le afease su continuo maltrato a los comerciantes y la falta de planificación.
“O futuro non parece nada halagüeño”, dijo el socialista Rafael Rodríguez Villarino; “a preocupación entre os praceiros e os axentes sociais é evidente”, comentó José Araújo (Ciudadanos), mientras que el nacionalista Luis Seara lamentó que “queden temas de calado sen planificar”, mostrando además su preocupación por la posible pérdida de la subvención estatal, algo que derivó en un cruce de acusaciones por la responsabilidad de esto entre PP y PSOE.
Otro de los temas polémicos fue tratado a instancias del PSOE, tras conocer que Jácome ha dado orden a los emprendedores que ocupan los viveros del CIE de dejar esos puestos antes del 31 de agosto. “Es un error, deje de atacar a los pilares económicos”, criticó la socialista Juana Ageitos, en la línea de Araújo, censurando que el alcalde “queira exterminalo todo sen nada alternativo”.
Tampoco esquivó la crítica el antiguo teniente de alcalde de Jácome. Jorge Pumar (PP) mostró la intención de su partido de que “el CIE no solo continúe, sino que se potencie”, encontrando la rápida respuesta del regidor, que le reprochó que “si tan vital es, ¿por qué no asumiste la competencia sobre él?”, insistiendo en que quiere esos espacios para personal municipal, antes de volver a criticar La Molinera -”era una trapallada”, dijo- o la Universidade Popular. Pumar le replicó: “Detesto que diga que La Molinera es una trapallada cuando fue un centro pionero”. Como con la Plaza de Abastos, todos los concejales salvo los tres de DO votaron para que todo siga cómo está.
Por parte de los populares, Flora Moure criticó que la moción “es para llamar la atención” y defendió que su partido “está para ser útil a Ourense”. El portavoz de DO, Armando Ojea, criticó el “desprecio á presunción de inocencia”, por el proceso judicial en el que está envuelto Jácome.
Unanimidad para reclamar la potenciación de la Vía da Plata
La pérdida de atractivo de la Vía da Plata, estancada en peregrinos en un bienio clave con el Xacobeo, centró el inicio del pleno con dos mociones de PP y PSOE, que suscitaron la unanimidad de la Corporación para pedir a las administraciones la potenciación de esta ruta, aprovechando también el futuro AVE.
“No” a renombrar el Puente Nuevo como Federico García Lorca, petición del PSOE
El PSOE se topó con el rechazo del gobierno municipal y del BNG para renombrar el Puente Nuevo como Federico García Lorca, al entender que pese a que el poeta merece ser homenajeado, no ven pertinente cambiar una denominación asentada entre los vecinos y que nadie atendería.
