Uno de los testigos admite que "insinuó" a "su amigo" el expresidente los cinco nombres de las personas que contrató durante dos años
Jefes de servicio han negado este martes que designaran a las personas para contratos temporales en la Diputación de Ourense en sus declaraciones como testigos en la segunda sesión del juicio que sienta al expresidente de la institución provincial José Luis Baltar en el banquillo acusado de prevaricación.
Durante la mañana del martes prestaron declaración ocho responsables de servicios como Vías y Obras, Teatro Principal o Pazo de Deportes, y casi todos negaron ser ellos los que designaban a las personas para los contratos temporales que hacía la institución y tampoco para los 104 de 2010 denunciados.
Sólo el de la biblioteca, Enrique B., ha manifestado que su petición era para personas concretas, pues eran especialistas en encuadernación, y documentación "ante la necesidad apremiante de catalogar varias bibliotecas donadas".
También el presidente de la Fundación Casdemiro, con convenio con la Diputación, admitió en un interrogatorio muy bronco con el fiscal, que él "insinuó" a "su amigo" Baltar, los cinco nombres de las personas que contrató durante dos años para la fundación pagadas por la Diputación.
A lo largo de seis horas declararon como testigos cuatro contratados y una decena de responsables de servicios de la Diputación de Ourense entre enero y marzo de 2010 y, salvo el caso de la biblioteca y de la fundación, otros dos explicaron que pudieron opinar sobre algunos candidatos que ya habían sido contratados antes en la institución provincial, contrariamente a lo dicho por Baltar que atribuyó a jefes de servicio y Personal esa selección que a él le llegaba en forma de decreto sólo pendiente de su firma.
Entre los responsables estuvo la directora del Teatro Principal, Olga Mojón, que fue reprendida por la jueza pues no detalló, antes de declarar, que tenía una relación familiar con el acusado, y sólo lo ha explicado a preguntas del abogado del PSOE. "La única relación familiar es que es el abuelo de mi hija, pero a mí no me es nada, aunque fui su nuera", ha detallado Mojón.
Entre los contratados de aquel primer trimestre de 2010 declararon un peón que fue alumno de Baltar, una joven que tampoco ha indicado que fue concejala de Piñor en 2011 durante unos meses, aunque a preguntas del letrado del PSOE sí dijo que fue "en unas listas por hacerle un favor a una amiga" y que conocía a Baltar "de verlo en la televisión".
NECESIDADES PREVISIBLES, NO URGENTES
Además de la coincidencia en las declaraciones, en lo que se refiere a la elección de personas concretas para los 104 contratos denunciados, también la hubo cuando las preguntas se referían a la necesidad de los contratos para cada servicio, pues casi todos dijeron que eran necesidades estructurales y previsibles, no urgentes, salvo en el caso de la imprenta.
El que era regente de ese servicio en 2010, jubilado hace año y medio, ha detallado que hizo dos peticiones para seis trabajadores, en sendos escritos separados por un espacio temporal de un mes "debido a la sobrecarga de trabajo que supone la edición de los boletines de ordenanzas fiscales de los ayuntamientos" y dijo al fiscal "no recordar" por qué presentó la petición en enero de 2012, cuando ya había pasado el agobio de trabajo.
NO SABEN O NO RECUERDAN
Todos los jefes de servicio respondieron a preguntas sobre la coincidencia de que numerosos escritos de petición de personal llevasen como fecha el día 12 de enero. Y todos respondieron que no recuerdan o no saben el motivo de esa coincidencia, más allá de que a principios de cada año "se presentan los escritos de necesidad de trabajadores, porque hay dotación presupuestaria".
En el caso concreto del director del Pazo de Deportes, Ángel Cid, ha manifestado que en todos los años que lleva en la Diputación "cuando hay dinero se hacen contratos temporales y cuando no lo hay, después de mediados de cada año, hay que aguantarse con lo que se puede tener".
En sus declaraciones, todos han afirmado no haber visto que se publicitasen los puestos de trabajo para estos contratos temporales, o que este seguimiento no entraba en sus competencias.
Por parte de los testigos que integran la lista de 104 contratados denunciada, han explicado que llevaron su currículo en mano al servicio de Personal, frente a la directora Olga Mojón, que aseguró desconocer totalmente el proceso de contratación pero aseguró "que los que querían trabajar en el teatro presentaban los currículos por registro, en la Diputación", tal como ha sostenido Baltar en su declaración inicial.
ELIGIÓ COMPROMISARIOS
Según los jefes de servicio, había preferencia porque se contratase a gente que ya había trabajado en la Diputación de Ourense, porque ya conocían el funcionamiento y, de los cuatro contratados que declararon por la mañana, tres eran contratados habituales pero intermitentes, tal como ha manifestado uno de ellos.
La única de ellos que se estrenó con el contrato de 2010 fue la exedila de Piñor. Una más, natural de Nogueira de Ramuín y vecina de Ourense, ha admitido conocer a Baltar de actos del PP y de que fue convocada para votar en la sede del partido para elegir a los compromisarios que en el congreso de ese mismo año 2010, participaron en la elección del hijo de Baltar, José Manuel Baltar, como nuevo presidente del partido en la provincia, frente a la candidatura del alcalde de Verín, Jesús Manuel Jiménez Morán.
En la sesión de tarde estaba previsto que, a partir de las 16,30 horas, presten declaración como testigos varios jefes de servicio, trabajadores contratados en 2010 y los alcaldes de Vilamarín, Amador Vázquez, y Vilamartín de Valdeorras, Jesusa Candal, llamados todos ellos por el fiscal.
