El pintor ourensano Corral Sousa inaugura hoy su primera exposición individual de pinturas a pastel seco en la Fundación Araguaney-Puente Culturas (Santiago de Compostela), a las 19,00 horas
Los primeros pasos de Corral Sousa lo llevaron, literalmente, hacia la pintura : "Nací en casa de un pintor y desde que empecé a andar pude ver como mi padre pintaba y pintaba".
¿Cuándo empezó su andadura pictórica?
A los siete años mi maestro, es decir mi padre, me ponía modelos del natural que yo, poco a poco, iba dibujando. A los 12 años ya pintaba al óleo y este fue el momento en que podría decirse que comenzó mi recorrido en el mundo de la pintura.
¿Donde encuentra la inspiración?
Me considero una persona muy observadora, por tanto, cuando una cosa me emociona, por muy simple o sencilla que sea, estudio la forma de poder llevarla a cabo pintando.
¿Quién ha influido en su obra?
El único maestro que tuve, nunca quise tener otro, fue mi padre, lo tengo claro.
En pocas palabras, ¿cómo describiría la exposición que se inaugura hoy?
Es parte de mi última época, puede observarse un poco de todo. Recoge un autorretrato, edificios religiosos, paisajes rurales y urbanos, bodegones...
Si tuviera que escoger una de las 29 obras que componen la muestra. ¿Cual sería y por qué?
Indudablemente, el Pórtico de la Gloria de Santiago, estuve durante bastante tiempo estudiándolo a distintas horas del día, incluso llegué a hacerme amigo del sacristán, hasta que di con la luz adecuada para lo que yo quería hacer. Por tanto, a mayores de la dificultad que entrañó la realización del dibujo, esta obra tiene todo mi corazón y mi alma. n
