El fiscal lo acusa de un delito contra la salud pública y reclama cuatro años de prisión para él
El ministerio fiscal acusa a R.L.G. de un delito contra la salud pública por intentar introducir droga, hachís, cocaína y heroína, en el centro penitenciario de Pereiro de Aguiar. Reclama una pena de cuatro años de prisión y multa de 4.000 euros o seis meses más de arresto en caso de impago.
El procedimiento penal que tiene fecha para su enjuiciamiento el próximo jueves en la Audiencia hace referencia al cacheo al que sometió al interno el 20 de septiembre de 2016 cuando regresó a la prisión, tras disfrutar de un permiso penitenciario de tres días. Pese a que en el registro al que fue sometido en el control de entrada, los funcionarios no hallaron nada de interés, le comunicaron que le iban a trasladar al hospital para realizarle una prueba ecográfica con el fin de detectar si portaba alguna sustancia estupefacientes en el interior de su cuerpo. El personal de la prisión de Pereiro tenía sospechas de que R.L.G. podría estar vendiendo droga en el interior del penal e incluso había pedido al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Lugo autorización para realizarle pruebas médicas con objeto de detectar droga en el interior de su organismo.
El interno ante esta advertencia entregó voluntariamente 20 envoltorios en forma de bellota que contenían hachís, además de un preservativo que contenía en su interior dos envoltorios con heroína y cocaína. Todas estas drogas las llevaba ocultas en el recto. Posteriormente, al ser conducido al hospital expulsó otras 15 bellotas de hachís, que previamente había ingerido para introducirlas en el centro penitenciario.
En total, tal como relata el fiscal en su escrito de calificación provisional, el acusado llevaba 35 bellotas de resina de hachís con un peso de 352,6 gramos (valoradas en 2.166 euros), 2,5 gramos de heroína, con una pureza del 40% (219 euros), 2,4 gramos de cocaína, con una pureza del 71,665 (260 euros) y 0,6 gramos de cocaína con pureza del 57,52% (valorada en 55 euros).
