Los robos de herramientas, maquinaria y material de obra se dispararon en los últimos días. Los delincuentes vaciaron una carpintería en la localidad de Freáns, en el municipio de Padrenda, a la que accedieron tras arrancar el extractor de gases. Aprovecharon el agujero abierto para instalar el aparado para descolgarse por el muro hasta el interior. El botín, que supera los 6.000 euros, lo cargaron posiblemente en un camión con el que se dieron a la fuga.
La Guardia Civil inspeccionó el negocio con el objetivo de hallar pruebas que permitan identificar a los ladrones, pero cuando los agentes aún no había concluido su trabajo saltaba el aviso de un nuevo robo de herramientas y maquinaria, en este caso en una caseta situada en la estación de ferrocarril de Vilar de Barrio. Los ladrones arrancaron varios barrotes de la puerta y sustrajeron material valorado en más de 3.000 euros, perteneciente a una empresa que realiza trabajos en la línea del tren de alta velocidad (AVE).
Pero estos no fueron los únicos robos. Un vecino de Xunqueira de Espadanedo, identificado como A.L.V., de 70 años, denunció en el cuartel de Esgos la sustracción de siete ventanas y tres puertas que tenía listas para colocar en una vivienda en la localidad de Feirobal, dentro del mismo municipio. El botín aún está pendiente de cuantificar.
Escaló por la pared
Los ladrones también ejecutaron dos robos durante el cambio de año en viviendas de la provincia. El último fue en la misma Nochevieja en la casa de un vecino de Sobradelo (Carballeda de Valdeorras) identificado como M.B.V., de 70 años. Los autores, que accedieron al interior escalando por una pared cuando el dueño se había ausentado, revolvieron todo el inmueble (ropa, armarios, cajones y vasijas) y se apoderaron de 500 euros que el afectado guardaba en un sobre.
Horas antes, un vecino de Pereiro de Aguiar, J.A.A., denunciaba que los ladrones habían entrado en su vivienda tras inutilizar el sistema de alarma, romper una persiana y, posteriormente, forzar una ventana.
El denunciante se percató del robo al encontrar la casa patas arriba (toda revuelta) pero inicialmente no hecho nada de valor en falta. La Guardia Civil investiga cada una de las sustracciones para identificar a los autores.
