Muchos ourensanos se han encontrado esta mañana con una larga cola en la oficina de Correos del centro de la ciudad. Los usuarios que acudieron hasta allí a buscar sus misivas o paquetes o para hacer su envío de turno se han encontrado que la máquina para dispensar turnos no funcionaba. Por ello, se ha retrocedido por un día en el tiempo y los trabajadores han llamado a la gente el grito de "el siguiente", como se hacía antaño.