El sector de la logística está viviendo un problema importante de déficit de transportistas en la provincia en los últimos meses, según certifica Joaquín Tato, presidente de Conductores Asociados de Valdeorras (Coesva). "Cuando yo empecé te salía a cuenta trabajar en carretera con respecto a quedarte en un almacén, pero, para poner un ejemplo gráfico, si en 2002 o 2003 se ganaban 2.400 euros al mes sin trabajar los fines de semana, ahora se contratan chóferes por 2.000 o 2.200 y trabajando fines de semana fuera de casa", explica. Tato añade que "a los costes de gasóleo y demás, hay que añadir casi 1.000 euros en comidas y estancias fuera de tu casa".
Durante un tiempo, esta carencia de transportistas se tradujo en la contratación de "conductores foráneos, sobre todo de Portugal y países del Este, que subirían hasta un 30% en los últimos 10 años, pero ahora hasta estos han bajado y las empresas tiran directamente de las autoescuelas, gente que coge por primera vez un camión o que se ve sin trabajo o ahogado por la hipoteca", apunta.
Alberto Vila, secretario de Apetamcor, reconoce que "la escasez de conductores es generalizada" y que "claro que tiene que ver con los márgenes de beneficio" y también con "la exigencia de esta profesión, que es vocacional y te obliga a estar mucho tiempo fuera de casa".
Añade que esa falta de profesionales "es más acusada en una zona como Valdeorras, donde hay mucho transporte internacional".
Experiencia
Alejandro Doforno, ourensano de 26 años, es hijo, nieto y sobrino de transportistas y aunque afirma que vivió el mundo del camión "desde la cuna", empezó a trabajar al volante de uno a los 22 años.
"Es cierto que el margen de beneficio es bastante menor en la actualidad que hace años", afirma. Doforno lo ejemplifica: "El precio de los portes se ha venido manteniendo a lo largo de estos últimos 10 años o incluso, en ocasiones, ha bajado, mientras el coste del gasóleo o la póliza del seguro sí que han subido y todo eso se nota a final de mes".
Otro dato: "No todos los jóvenes pueden afrontar el coste de un carné de conducir para poder llevar camiones de transporte, que está entre los 4.000 y 6.000 euros".
Propuesta
En todo caso, Joaquín Tato considera que la única vía para hacer atractivo el sector a las nuevas generaciones es "compensar el salario con las horas que se trabaja; cuando yo empecé te salía a cuenta trabajar en la carretera, pero ahora cobras casi lo mismo estando en un almacén".
Alberto Vila coincide en el diagnóstico: "Si cobras 1.300 euros por llevar mercancías y 1.000 por descargar en una nave...".
Con este panorama, el presidente de los conductores valdeorreses apunta que "la solución es que se unan las empresas y se trasladen los sobrecostes al precio final, para que resulte rentable".
Testimonios
“Yo empecé con 22 años y un vehículo viejo, pero me salió bien”
Richard Gómez, carballiñés de 28 años, dirige con su hermano Esteban la empresa Transgómez, pero para llegar a este punto, "hubo que currárselo". Ahora afirma estar "contento, porque conseguí lo que quería. Sí es cierto que es una profesión dura, yo empecé con 22 años y un camión viejo, pero me salió bien".
La crisis de conductores la achaca al descenso de los márgenes de beneficio y al hecho de que es una profesión muy sacrificada.
“Cada vez hay gastos más elevados y los márgenes de beneficio bajan”
Miguel González, de 56 años, lleva la mitad de su vida dedicado al mundo del transporte. Entró "porque me gustaba", aunque reconoce que "las cosas han cambiado drásticamente desde que empecé a trabajar en este sector, en cuanto a sueldos, modos de trabajar...".
Subraya que "cada vez hay más gastos, más elevados y los márgenes de beneficio son menores". Considera que esta es la principal razón de que la gente joven no se anime a entrar en el sector.
“Mi sueño siempre fue tener un camión; camiones habrá siempre”
Martín Soares Suárez, de 26 años y natural de Trasalba (Amoeiro), lleva el mundo del transporte en la sangre. "Mi padre, mi abuelo, mis tíos fueron camioneros. Mi sueño siempre fue tener un camión y hoy tengo en este momento tres camiones". Reconoce que "cuando estaba de chófer, mis amigos se iban a la fiesta y yo me tenía que ir a Sevilla u otro sitio", pero subraya que "camiones habrá siempre". La crisis de conductores la achaca a la subida de costes.
“Hasta ahora se tiró de Portugal para conseguir conductores”
El secretario general de la Asociación Empresarial de Transporte de Mercancías por Carretera de Ourense (Apetamcor), Alberto Vila, reconoce que se sufre una escasez de profesionales ourensanos en el sector de la logística "como en más profesiones", aunque en este caso ha llevado a buscar alternativas. "Hasta ahora se tiró de Portugal para conseguir conductores, pero ahora ya se contrata gente de Suramérica e incluso de Marruecos", reconoce Vila.
