SOCIEDAD

Un mapa fijará las zonas inseguras para las mujeres

El Concello elaborará un estudio para prevenir situaciones de riesgo y tomar medidas

 

El Concello de la ciudad pretende conocer todos los espacios urbanos que son percibidos por las mujeres como inseguros con el objetivo de poner en marcha medidas para, por un lado, prevenir situaciones de riesgo y, por otro, convertirlos en zonas igualitarias, es decir,que su uso no sea limitado por cuestiones de género.

El estudio, según la entidad local, es pionero en el territorio nacional. Lo realizará el propio Concello en colaboración con la empresa consultora Rizoma Social, en la que participan expertos de la Universidad de Vigo y de ámbitos sanitarios y sociológicos. La iniciativa fue dada a conocer ayer por la concejala de Igualdade, Sofía Godoy y se enmarca dentro del tercer Plan de Igualdad que puso en marcha el Concello.

Para Sofía Godoy, el estudio es "un diagnóstico do hábitat e da  convivencia igualitaria na cidade, con que se aposta por adoptar unha perspectiva de muller tras escoitar as interesadas, que teñen en consideración que existe unha distribución dos espazos urbanos en clara desigualdade de xénero", aseguró.

En la presentación del proyecto participó la antropóloga y socióloga Fátima Braña Rey, quien desgranó la metodología del trabajo que se va a realizar, con el que se pretende dar respuesta a cuatro puntos que considera fundamentales. El primero es detectar las necesidades de la población femenina respecto a los espacios públicos en la ciudad. En esta cuestión también se analizará la percepción de miedo por parte de las mujeres con el objetivo de establecer recomendaciones enfocadas a potenciar la autonomía de cada mujer .


Encuesta


Para conocer la sensación de miedo que perciben las mujeres en ciertas zonas urbanas, un equipo técnico realizara encuestas con mujeres en situación de vulnerabilidad. Además, los expertos  comprobarán de forma directa observando la percepción de miedo sobre el terreno y recopilando información entre los vecinos de cada barrio.  El trabajo debe estar concluido dentro de cinco meses para redactar las conclusiones y ofrecer un conjunto de medidas para que todos las zonas urbanas se tenga en cuenta la igualdad. 

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