La crisis económica duplicó las reclamaciones de los ourensanos por retrasos, pérdidas de maletas o cancelaciones durante sus viajes
En época de crisis, el consumidor reclama por casi todo y no duda tanto a la hora de litigar por la calidad los servicios que se le prestan. De esta realidad saben bien las oficinas de consumidores pero también los juzgados de la provincia, auténticos fedatarios de la realidad. El Juzgado Mercantil de Ourense (instancia 4), único para toda la provincia, así lo testimonia, con la avalancha de demandas civiles que recibe contra las compañías aérea por retrasos de vuelos, cancelaciones y, en menor medida -en torno al 15%-, la pérdida de maletas, independientemente del lugar o la empresa afectada siempre que el domicilio del usuario esté dentro de la provincia.
De hecho, según dice la magistrada titular, Eva Martínez Gallego, el año 2015 cerrará con una cifra insólita: cerca de 200 reclamaciones alusivas única y exclusivamente a problemas derivados de los desplazamientos en avión. Hasta el punto en que en su agenda reserva un día al mes, con una media de 15 vistas, a las reclamaciones contra las compañías aéreas. En 2014 había un día de señalamientos cada dos o tres meses. "Este tipo de reclamaciones se han duplicado a lo largo de este año tanto por la crisis como por un mayor conocimiento de la gente, que sabe que, aunque te paguen el hotel o la comida, tiene derecho a una indemnización", explica la jueza.
El convenio de Montreal
Para ello es de aplicación el convenio de Montreal que da derecho a resarcimientos económicos siempre que se acredite un retraso por un periodo concreto, teniendo en cuenta la plaza de origen y lugar de destino -de 250 a 600 euros- (un retraso de más de tres horas de una conexión Santiago-Madrid ya da derecho a una indemnización de 250 euros por pasajero). A mayores, se pueden compensar los perjuicios económicos (gasto de hoteles en pernoctaciones/compra ropa) o daños morales (el planteado por una madre que aguarda con niños pequeños en un país extranjero). Actualmente, en torno al 90% de las reclamaciones se resuelven de forma favorable para el demandante.
La togada cree que los consumidores cada vez acuden más al juzgado porque las reclamaciones extrajudiciales suelen caer en un cajón muy hondo. Aunque, posteriormente, al llegar al juzgado cambian de actitud. "Las compañías suelen transar bastante bien y en torno al 50% de las vistas no se celebran porque hay acuerdos previos -satisfacción extraprocesal- porque las compañías ya han pagado ", dice Martínez Gallego.
El proceso es más sencillo de lo que a priori podría parecer porque tan siquiera hace falta acudir con letrado (cuando la cuantía no excede de los 2.000 euros), si bien muchas vienen canalizadas a través del reclamador.com, asegura la jueza desde su experiencia en Ourense. Eso sí, advierte que el consumidor debe presentar antes del juicio el mayor número de pruebas posibles junto al escrito de demanda: facturas, fotos de las pantallas para verificar los retrasos o cancelaciones ... El día del juicio sería tarde.
También la SGAE
Asimismo, este juzgado reserva otro día al mes para las reclamaciones que presentan las entidades privadas como SGAE o AGEDI/ AIE dedicadas a la defensa y gestión colectiva de los derechos de propiedad intelectual por comunicación de obras (imagen y sonido).
Eva Martínez asegura que este año, por contra, han descendido las reclamaciones realizadas contra establecimientos hosteleros con televisión o aparatos reproductores de música. "Antes teníamos reservados hasta dos días al mes y ahora bajó a uno, con ocho o nueve vistas de las que un 99% son estimatorias", comenta. Añade que estas entidades están llegando a acuerdos de pago parcial a tenor de la situación económica.
En cuanto a las históricas reclamaciones de la SGAE contras las comisiones de fiesta de los pueblos, han pasado a ser historia. "Las comisiones ya establecen en los contratos que las orquestas paguen los derechos de autor", dice.
