El jefe del servicio de Pediatría del CHUO, Santiago Fernández Cebrián, ha sido uno de los autores de los informes que han llevado a adoptar la decisión de dejar de atender partos en el hospital de Verín. Defiende el trabajo técnico realizado y garantiza que es la solución acertada para el momento actual.
Menuda tormenta ha generado la decisión. ¿Cómo surge?
La decisión no es fácil, es compleja. Cuando la gerencia nos pide un informe técnico sobre la maternidad, nos basamos en los documentos que hay hoy en día de sociedades científicas o del Ministerio. En las áreas con menos de 600 partidos hay que evaluar de forma proactiva los riesgos.
Pero supongo que es un criterio que hay que dimensionar a cada territorio.
Claro, es algo a nivel estatal. Lo que surge es el concepto de cultura de seguridad del paciente, algo que siempre tenemos presente. Existe una evidencia científica que relaciona morbimortalidad y volumen de actividad de procedimientos. Cuando hay menos, el riesgo puede aparecer más fácilmente. Vemos que en Verín hay una tendencia decreciente de la natalidad muy llamativa, ha caído en picado, sumándose una mayor complejidad de los embarazos.
¿Menos casos atendidos supone menos seguridad?
Pasa en todos los procedimientos. Por ejemplo, en Ourense no puede haber trasplante hepático infantil, puede haber dos niños. Nadie entendería tampoco una unidad de neurocirugía en un comarcal.
¿Por qué se puede hacer el seguimiento de un embarazo en Verín, pero no el parto?
El personal de Verín es perfecto, no hay ningún problema. El riesgo está en el parto y la etapa neonatal es un período de especial riesgo para incidencias. Queremos evitar riesgos.
¿No hay criterios económicos en la decisión adoptada?
Que yo sepa no, es algo exclusivamente técnico.
Parece raro querer luchar contra la despoblación y reducir servicios.
No hay más natalidad por tener un paritorio. Fíjate Vigo, con un hospital nuevo y maravilloso que perdió 600 partos. La ntalidad es un tema social, de tener actividad económica. Es un problema de toda Europa.
¿Valdeorras peligra?
No tienen absolutamente nada que ver, hay el doble de partos, los desplazamientos son más largos.
¿Y el hospital comarcal? Muchos pensarán que ahora esto, después otra cosa.
Yo eso no lo pensaría, ni mucho menos.
Y la pediatría, ¿goza de buena salud?
Ourense es una provincia con un magnífico servicio.
¿Faltan pediatras?
La falta de especialistas es un mal nacional.
