Una reyerta nocturna en la plaza de las Mercedes le reportó a Gabriel R.L., de 26 años, nueve meses de prisión por golpear con un botellín a un contrincante y a continuación con los puños.
La fiscal reclamaba más pena (dos años y medio de cárcel) porque el arma empleada (la botella) está considerada un “instrumento peligroso”, pero finalmente ayer rebajó porque aplicó la atenuante de dilaciones indebidas. Los hechos ocurrieron en la madrugada del 19 de diciembre de 2014, hace más de siete años.
En este proceso había otras dos jóvenes acusadas de agredirse mutuamente, pero se retiró la acusación porque las perjudicadas no mantuvieron las denuncias y se trataba de lesiones leves. También figuraba como investigado al supuesto acompañente de Gabriel pero la víctima no lo identificó.
El inculpado admitió ayer en el Juzgado Penal 2 que golpeó con el botellín tras una discusión sobre las cinco y media de la madrugada con el denunciante.
El golpe recibido por este último le ocasionó heridas y hasta una cicatriz en la cara, por lo que debe indemnizar al denunciante con algo más de 5.000 euros y hacerse cargo de la factura de la atención prestada por el Sergas al perjudicado.
